Una Europa dividida intenta resolver la crisis migratoria en medio de la creciente tensión
Europa tiene que decidir como distribuir a las 160.000 personas llegadas al continente en busca de refugio, sin contar a los migrantes económicos, informa Reuters. Este y otros problemas apremiantes de la crisis migratoria serán discutidos el martes en el encuentro de los ministros de Interior de los países de la UE.
Además, para este miércoles está planeada una reunión entre los líderes europeos, convocada por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk. En ella se abordará el tema de la financiación adicional necesaria para resolver la crisis, así como estrategias a largo plazo para atender a los inmigrantes y refugiados.
Entre estas estrategias figuran la intensificación de la cooperación con Turquía y los países limítrofes con Siria para asegurar las fronteras; la posibilidad de modificar la Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores (Frontex) para convertirla en una agencia fronteriza y de guardacostas de pleno valor; así como la creación de una lista de países cuyos ciudadanos no pueden ser considerados como refugiados, según Reuters.
Asimismo, se discutirá la necesidad de ayuda y de fondos adicionales para el Programa Mundial de Alimentos de la ONU y para el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados.
Las reuniones tienen lugar en medio de la creciente tensión que vive la UE ante el flujo de inmigrantes y de personas que llegan en busca de asilo, ante todo sirios, pero también de otros países de Oriente Medio, de África y de Afganistán. Este fin de semana más de 20.000 personas cruzaron la frontera entre Hungría y Austria, mientras que la cantidad de migrantes que entran diariamente en Austria sigue creciendo.
Hungría ha respondido al desafío construyendo muros e instalando alambre de espino en su frontera con Serbia. Después de que el flujo principal de migración se desviara de Serbia a Croacia para penetrar en Austria a través de Hungría, este país empezó la construcción de un muro en esta frontera.
Tras los choques registrados entre la policía y los inmigrantes en tierra de nadie, entre Croacia y Eslovenia, este último país decidió seguir los pasos de Hungría levantando una valla de seguridad.
Mientras tanto, en la ciudad de Wertheim, en Alemania, se registró fuego en el edificio de un gimnasio que se preparaba para acoger a los inmigrantes. La policía sospecha que el incendio pudo haber sido deliberado a fin de evitar la llegada de uno 400 inmigrantes a este asilo. La ciudad, de alrededor de 22.000 habitantes, ya ha acogido a unos 600 refugiados.
"Hay recursos de sobra en la UE para crear un bote de solidaridad", pero para resolver la crisis migratoria "habría que redefinir muchos aspectos económicos" de base en la UE, opina el experto Armando Fernández Steinko de la Universidad Complutense de Madrid. Sin ello, "países como Macedonia, absolutamente desbordados [por los migrantes], recurrirán a medidas absurdamente inhumanas como las que ahora está aplicando, por ejemplo, Hungría", concluye.