El fatal descuido que le costó la vida al presunto cerebro de los atentados de París

El hallazgo de un teléfono celular abandonado por un miembro del Estado Islámico en un cubo de basura próximo a la sala de conciertos Bataclan resultó fundamental para dar con el terrorista. El teléfono encontrado con una frase crucial y datos de geolocalización acusaba directamente al cerebro de los atentados en París, según informa el diario 'Le Monde'.

A partir de un mapa con la ubicación de la sala de conciertos y la frase "vamos, que estamos empezando", la Policía desencadenó la operación que se cobró la vida de Abdelhamid Abaaoud cinco días después de los atentados mortales en París.

La investigaciones sobre la geolocalización de dicho teléfono indicaron que su dueño había estado en una dirección de Saint-Denis antes de los ataques. Por ende, las pistas los llevaron hasta uno de los puntos en los que se realizó el operativo en aquel suburbio, dando con el apartamento alquilado por Salah Abdeslam, un terrorista que participó también en los atentados.

Luego de este craso error, la intensa redada policial que tuvo lugar este miércoles en el suburbio parisino de Saint-Denis finalmente se saldó con la muerte del presunto organizador de los atentados de París.