Entre los objetivos de los terroristas del Estado Islámico pueden encontrarse los yacimientos petrolíferos de Libia y del territorio de la península del Sinaí, informa Reuters citando un alto cargo político de Estados Unidos que facilitó la información en condición de anonimato.
Según el político, EE.UU. estudia con detenimiento los yacimientos, oleoductos, la infraestructura y las rutas de los camiones cisterna de los yihadistas en los lugares que pueden convertirse en potenciales blancos de los ataques terroristas. "Están buscando activos de petróleo en Libia y otros sitios. Estaremos preparados", dijo el político.
Cabe mencionar que los yihadistas reclutan a especialistas extranjeros. Los bajos precios del crudo podrían contribuir a la lucha contra el Estado Islámico dado que disminuyen los ingresos de la organización terrorista.
El oxígeno de los terroristas
La principal fuente de ingresos del EI es la exportación y venta del petróleo, de la que los terroristas obtienen anualmente hasta 500 millones de dólares. Según el diputado y exasesor de seguridad nacional de Irak Mowaffak al Rubaie, los extremistas venden el petróleo en el mercado negro turco.
"En los últimos ocho meses el Estado Islámico ha conseguido vender (…) petróleo por 800 millones de dólares en el mercado negro en Turquía. Ese petróleo de Irak y Siria es transportado en camiones de estos países a través de las fronteras turcas y se vende (…) como mínimo un 50% más barato que el precio internacional", reveló Al Rubaie.
Entre otras fuentes de ingresos se encuentran los impuestos que los yihadistas recaudan de los residentes de los territorios controlados por el EI, la venta de bienes no militares y el saqueo de bancos, bases militares y casas de oficiales iraquíes.