Rusia diseña un nuevo misil balístico para el sistema tierra-tierra Iskander-M

Ahora, este sistema operacional de 500 kilómetros de alcance y de 10 metros de margen de precisión podría lanzar cinco tipos de misiles balísticos y un misil de crucero.

El sistema operacional-táctico de misiles tierra-tierra rusos clase Iskander-M, quizá la mayor 'pesadilla' de la OTAN en el continente europeo, ha recibido un nuevo misil balístico, ha informado Valeri Kashin, jefe de la oficina de diseños de la empresa que fabrica estos sistemas, situada en la ciudad de Kolomna, cerca de Moscú.

"Todos estos años hemos estado actualizando y desarrollando nuevas armas para el sistema de misiles Iskander-M. En particular, hemos desarrollado un nuevo misil balístico que en diciembre de este año fue sometido a pruebas interdepartamentales que se saldaron con éxito", dijo el ingeniero citado por TASS, aunque evitó revelar más detalles al respecto.

Los misiles tierra-tierra del sistema Iskander-M tienen un alcance de hasta 500 kilómetros. Cada misil de este sistema de mediano alcance puede portar tanto una carga convencional como nuclear. Su gama de municiones incorpora también cabezas de racimo con distinta carga explosiva y elementos de destrucción.

El Iskander-M es conocido por ser un sistema cuyos misiles garantizan la destrucción del objetivo. Son muy difíciles de localizar e imposibles de derribar.
En la trayectoria inicial y final Iskander procede a maniobras impredecibles con sobrecargas de 20-30G.

Para destruirlo un misil interceptor debe duplicar o triplicar su calidad de maniobra, pero actualmente no existen misiles capaces de este tipo de actuación ni hay perspectivas de que existan en un futuro próximo.