El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha adoptado la resolución sobre el apoyo al alto el fuego en Siria. El documento exige que todas las partes del conflicto acepten el acuerdo y cesen los ataques con cualquier tipo de armas, incluyendo cohetes, morteros y misiles guiados antitanque. Los grupos terroristas como Estado Islámico y Frente al Nusra están excluidos del trato.
Los bandos enfrentados deben renunciar a la adquisición o intentos de adquirir territorios de otras partes que participan en el cese de las hostilidades y aplicar el uso proporcional de la fuerza en caso de defensa propia. También se comprometen a permitir a las agencias humanitarias el acceso rápido, seguro y sin obstáculos a lo largo de las zonas bajo su control operacional y permitir la asistencia humanitaria inmediata para las personas que la necesitan.
Además, la resolución prevé que Rusia y Estados Unidos determinen las regiones ocupadas por los terroristas y establezcan la línea directa de comunicaciones y posiblemente un grupo de trabajo para intercambiar información relevante sobre Siria. El documento fue desarrollado con la contribución de Rusia, EE.UU. y otros miembros del Grupo Internacional de Apoyo a Siria.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha confirmado "la devoción completa de la soberanía, la independencia y la integridad territorial" a Siria y ha expresado su apoyo a la resolución del conflicto con la ayuda de esa organización, basándose en el comunicado de Ginebra y las declaraciones de Viena.
En este sentido, los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU han exigido a las partes en Siria que respeten las obligaciones sobre el alto el fuego y han solicitado a su secretario general, Ban Ki-moon, y a su enviado especial para Siria, Staffan de Mistura, que los representantes del Gobierno sirio y la oposición retomen las negociaciones tan pronto como sea posible. Además, la ONU ha demandado a los bandos sirios a que creen las condiciones para establecer "una tregua firme a largo plazo".
Staffan de Mistura anunció este viernes que planea reanudar las negociaciones entre el Gobierno siro y la oposición el próximo 7 de marzo.
Además, Ginebra (Suiza) albergará uno de los centros de operaciones que formará parte de un mecanismo para controlar el cese de las hostilidades en Siria, afirmó el enviado especial Staffan de Mistura en el Palacio de las Naciones de la ciudad.