Muchos círculos poíticos y periodísticos de Estados Unidos esperan que Donald Trump pierda claramente estas elecciones presidenciales, pero el redactor jefe del portal The Washington Free Beacon, Matthew Continetti, expone siete razones por las que los demócratas no deberían subestimar a este precandidato republicano.
Para empezar, aunque Hillary Clinton es la candidata preferida entre los demócratas y tiene 2,8 puntos de ventaja sobre Trump en las encuestas, el empresario neoyorquino podría superar ese resultado "con facilidad", como consecuencia de que sus propuestas no han variado desde las primarias y se han vuelto muy populares entre el electorado, como muestran los últimos sondeos.
Otro motivo que refuerza esta postura es que el magnate podría asegurar su candidatura dentro de tres semanas, tras las primarias en los estados de Florida y Ohio, con lo cual tendría meses para trabajar con tranquilidad en sus estrategias de campaña. Por contra, los precandidatos demócratas Bernie Sanders y Hillary Clinton necesitarán más tiempo para dirimir quién vencerá.
Un factor más que juega a favor del candidato republicano es que Clinton es "vulnerable" y "ni su propio partido confía en su honestidad", sobre todo tras "el escándalo de los correos electrónicos". Por su parte, el multimillonario es "original" y resulta "cómico", asegura Continetti.
A su vez, Donald Trump "atrae a nuevos votantes", mientras que la participación entre los demócratas se ha reducido desde 2008. A esto se suma la entrada en la carrera presidencial de Michael Bloomberg —empresario, político liberal y exalcalde de Nueva York—, quien robaría votos a los demócratas, pero no a los republicanos.
Finalmente, Continetti estima que "el caos global ayuda a Trump", en función de que sus reacciones ante los atentados terroristas de París y San Bernardino le sirvieron para incrementar sus posibilidades como candidato. Lo mismo ocurrió cuando valoró los conflictos entre Rusia y Turquía o el terrorismo del Estado Islámico.