Durante un discurso en el Club Commonwealth en San Francisco el secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, declaró que China no debe perseguir la militarización en el mar de la China Meridional, informa Reuters.
Su declaración llega después del despliegue por parte de China de sistemas de misiles tierra-aire y aviones militares el mes pasado en la isla Woody.
"Las acciones específicas tendrán consecuencias específicas", destacó Carter. "Estas actividades [de China] tienen el potencial de aumentar el riesgo de error de cálculo o conflicto entre los Estados reclamantes".
EE.UU. ha estado tomando medidas para contrarrestar la creciente influencia de China en la región y ha aumentado tanto sus patrullas navales como la vigilancia aérea.
"Debe quedar claro que el Ejército de Estados Unidos continuará volando, navegando y operando siempre que lo permita el derecho internacional, como lo hacemos en todo el mundo. Porque el dominio marítimo debe estar siempre abierto y libre para todos", dijo Carter.
¿Qué hace EE.UU. en el mar de la China Meridional?
"Washington está jugando a un peligroso 'juego de la gallina' con los rusos y los chinos, que tratan de defenderse de la política estadounidense conocida como 'Consenso de Washington', que reduce a siervos a las poblaciones sometidas", sostiene la columnista Cynthia McKinney en su artículo para RT.
Hoy resulta cada vez más evidente que para Rusia la asignación de la condición de Estado vasallo es intolerable, mientras que los chinos recuerdan muy bien los daños del colonialismo británico. "El lugar de China en el Consenso de Washington se ha planteado como, al igual que en el caso de Rusia, proveedor de aportes para alimentar al capitalismo hambriento de EE.UU. y los antiguos amos coloniales de Europa occidental", señala.