¿Nueva era en la aeronáutica? La NASA retoma el programa de 'aviones X'

En esta ocasión, la NASA probará nuevas tecnologías para ahorrar combustible y ayudar a proteger el medio ambiente.

A falta de la aprobación del proximo presupuesto federal de Estados Unidos, a partir de octubre de este año la NASA relanzará el programa de 'aviones X' con un proyecto a 10 años, que empleará nuevas tecnologías aeronáuticas para tratar de desarrollar aeronaves que consuman hasta un 50 % menos de combustible y tengan hasta un 75 % menos de impacto ecológico, entre otras funciones.

Este país planea resolver esos problemas con el empleo de tecnologías específicas relacionadas con los diseños de aviones subsónicos ultraeficientes en vuelo. Así, las posibilidades abarcan desde incluir alas muy largas y estrechas hasta formas de propulsión eléctrica, fuselajes el doble de anchos o motores integrados en el vehículo.

Además, los prototipos de avión futurista incluirán materiales compuestos ligeros, diseños avanzados del sistema de propulsión —que también reducirá el ruido de los motores a reacción— y una versión diferente de los orificios de refrigeración y los flaps que ayudan a sustentar a los aparatos.

Por último, la NASA pretende probar biocombustible en los vehículos supersónicos para disminuir de manera drástica su nivel de ruido.

Antecedentes

El primer avión de la serie X fue el Bell X, que formó parte de un proyecto desarrollado en secreto y despegó en 1946. Se trató de la primera aeronave estadounidense con motor de cohete y la primera de la historia que rompió la barrera del sonido, el 14 de octubre de 1947.

A partir de allí, Estados Unidos desarrolló otros prototipos, pero fabricó muy pocos en serie. Entre las excepciones se encuentran el X-35, ahora más conocido como F-35 Lightning, o el X-56A, un avión no tripulado que muchos consideran como un antecesor de los drones.