Si bien la gran mayoría de los combatientes del Estado Islámico probablemente no esté utilizando Internet para mucho más que el envío de fotos en WhatsApp, cada vez aparecen más evidencias de que existe una pequeña unidad dentro del grupo terrorista que está manejando sus ambiciones cibernéticas, que van desde el trabajo con 'hackers' para lanzar ataques informáticos contra sus enemigos hasta la publicación de manuales que ayudan a sus seguidores a enmascaran sus comunicaciones en línea y defenderse del rastreo.
Tras analizar las actividades de los activistas yihadistas en la Red, el sitio BuzzFeed ha descubierto que algunas de las aplicaciones más utilizadas por los terroristas son el programa de mensajería instantánea más seguro hasta el momento, Telegram, y el servicio de microblogs Twitter, aunque el último está perdiendo popularidad entre los yihadistas por los crecientes casos de cuentas sospechosas.
En varias ocasiones los terroristas también utilizan WhatsApp y una aplicación semejante, Kik, pero hace poco consideraron que estos programas de mensajería no son suficientemente seguros. También se redujo el uso entre los yihadistas de la aplicación de mensajería Walkie-Talkie (que funciona con el principio de comunicador portátil entre dispositivos móviles), Zello, que permite enviar mensajes cortos de audio, cuando los servicios de inteligencia encontraron sospechosa la gran cantidad de versículos del Corán.
"Ser anónimo en línea es lo más importante para que podamos ayudar de forma segura a la yihad cuando llegue el momento", ha explicado el terrorista encubierto Abu Jihad a BuzzFeed Noticias en un mensaje privado en Telegram.
Un funcionario anónimo del Departamento de Defensa de EE.UU., por su parte, ha afirmado en una entrevista al portal: "Tratamos de estar presentes dondequiera que esté conversando el Estado Islámico". Sin embargo, según los expertos en seguridad cibernética, EE.UU. no está haciendo nada más que simplemente observar esos canales.
Mientras tanto el grupo terrorista sigue mejorando sus habilidades en el ámbito cibernetico día a día, advierten los expertos. Así, el mes pasado la revista en línea publicada por el Estado Islámico en francés, 'Dar Al-Islam', publicó su novena edición con una sección especial de 16 páginas dedicada a la seguridad en línea, que ofrece instrucciones detalladas sobre el uso de una serie de programas para acceder con seguridad a varios programas y comunicarse con otros miembros del grupo.
Los especialistas señalan que no es la primera guía para los yihadistas a través de Internet. Pero mientras que las instrucciones anteriores eran poco más que traducciones de guías de seguridad ya existentes, este material ha demostrado una gran evolución de la comprensión de la seguridad en línea y ofrece instrucciones detalladas sobre cómo superponer diferentes programas, tales como el uso de una VPN (tecnología de red de computadoras que permite una extensión segura de la red de área local, LAN, sobre una red pública o no controlada como Internet) para ayudar a esconder la ubicación y el envío de correos electrónicos cifrados que enmascaran el contenido de un mensaje.
No obstante, el mayor ayudante de los terroristas en el mundo cibernético es el propio Google, alarman los expertos: más de 50.000 personas buscan cada mes "unirse al Estado Islámico" con ayuda de sus servicios. Funcionarios anónimos de Jordania, por ejemplo, han comentado a BuzzFeed que los primeros resultados en árabe que ofrece el buscador dan instrucciones detalladas desde cómo y cuándo hacer las maletas hasta qué se debe decir a los padres para poder irse para unirse a las filas terroristas.