El presidente del Parlamento alemán arremete contra las "ambiciones autocráticas" de Erdogan
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, alberga "ambiciones autocráticas", ha afirmado el presidente del Bundestag Norbert Lammert en referencia al referirse al intento de Ankara de despojar a los diputados turcos de su inmunidad.
Lammert, que dirige la cámara baja del Parlamento alemán y es miembro de la Unión Democrática Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel, aseguró en declaraciones al diario 'Süddeutsche Zeitung' que los intentos de suprimir la inmunidad parlamentaria forman parte de "toda una serie de eventos con los que Turquía está cada vez más y más lejos de nuestros estándares de democracia".
La autoridad parlamentaria germana criticó las "ambiciones autocráticas" de Erdogan al recordar que la inmunidad legislativa fue pensada originalmente para "la protección del Parlamento y sus diputados de los ataques arbitrarios de los señores feudales".
En una votación preliminar, la Asamblea Nacional de Turquía manifestó el pasado martes un apoyo abrumador a la enmienda constitucional, que está totalmente respaldada por el Gobierno de Erdogan.
Si dos tercios de los parlamentarios votan a favor del proyecto de ley este viernes, se convertirá en ey, lo que significa que los diputados serían despojados de la inmunidad a la hora de apoyar verbalmente a los disidentes kurdos.
Esto significaría que 50 de los 59 parlamentarios del opositor Partido Demócrata del Pueblo (HDP) se enfrentarían a enjuiciamiento en virtud de la legislación modificada.
Lammert destacó que mediante el apoyo a Erdogan, la Gran Asamblea Nacional podría despejar "el camino de su propia pérdida de poder".
Las palabras de Lammert no parecen coincidir con las del resto de los líderes alemanes, que se han abstenido de criticar a Erdogan por sus drásticas medidas contra la democracia y la libertad de la prensa, ni han objetado sus intentos de procesar a un cómico alemán que se burló del mandatario turco en un poema satírico.
La UE firmó un acuerdo migratorio con Ankara el pasado mes de marzo en un intento desesperado de detener la mayor crisis migratoria que ha azotado al continente en las últimas décadas.