Chile Gate
En Chile sigue creciendo la polémica. Una corte de apelaciones, radicada en la ciudad de Santiago resolvió que el caso de fraude atribuido al Ejército sea tratado por la justicia militar y no civil, informa en un despacho Tele13.
Se trata del controvertido caso Milicogate, una estafa millonaria al denominado Fondo Reservado del Cobre, en el que los militares tienen una participación.
"Ese mineral es el rubro estratégico de exportación por excelencia para esta nación suramericana; el gran ingreso de Chile y uno de las pocas áreas que no se privatizaron, ni Pinochet se atrevió a hacerlo", dijo a RT Mariano Vázquez, periodista argentino, especialista en temas internacionales.
Cabe destacar que en el cono sur, se utiliza comúnmente la palabra 'milico' para referirse a los militares. Mientras que 'gate' hace referencia al escándalo de espionaje ilegal que en la década de los 70 le constó la presidencia de Estados Unidos a Richard Nixon.
¿Cómo participan?
La Ley Reservada del Cobre establece que el 10% de las utilidades que tenga la Corporación Nacional del Cobre de Chile (Codelco) serán destinadas a las Fuerzas Armadas.
Modificada de forma dramática durante la dictadura de Augusto Pinochet, esta disposición legal establece los procedimientos para destinar ingresos de la venta de cobre para comprar sistemas de armas y pertrechos militares para la defensa nacional, además prevé que la entrega de esos fondos a las fuerzas armadas debe realizarse de modo reservado y otorga el mismo carácter a la contabilidad, las cuentas y la inversión.
No obstante todas esas reservas, el caso fue puesto en la escena pública gracias a la investigación realizada por el periodista Mauricio Weibel para la publicación The Clinic. En ella se revela la existencia de innumerables facturas irregulares, al interior del Ejército chileno, que suman en total más de 2.200 millones de dólares.
Entramado institucional
Según lo publicado por Weibel, las facturas irregulares están fechadas de 2010 a 2014. Medios de prensa chilenos aseguran que desde 2011 existen evidencias del desvío y que el exministro de Defensa, Jorge Burgos, tardó un año en informar la irregularidad.
En la operación fraudulenta están involucrados el Comando de Apoyo a la Fuerza (CAF) y el Departamento de Planificación Financiera del Ejército. El hecho de que la Ley del Cobre establece secreto en cuanto a las compras de las Fuerzas Armadas, hizo imposible la fiscalización por parte de la Contraloría General de la República.
Hasta ahora se encuentran detenidos por el Chile Gate el coronel Clovis Montero, el cabo Juan Carlos Cruz, la sargento Millaray Simunovic, el suboficial Claudio González Palomino y el suboficial Miguel Escobar.
Más allá del secreto
Tras la decisión de que el caso sea radicado en la justicia militar, falta esperar por conocer las conexiones con civiles que fungen como proveedores del Ejército chileno o algunas empresas involucradas.
El periodista Mauricio Weibel, autor de la denuncia que revela la espectacular estafa, en entrevista con la red.cl aseguró que "el Ejército (chileno) dio de baja a un general que en su cuenta corriente recibe depósitos de un proveedor por 500.000 o un millón de pesos, sin ningún descuido. Hay confesiones de los involucrados que aseguran haber recibido dinero en efectivo en bolsas negras, en transacciones hechas en el club hípico y que se gastaban en apuestas, en fiestas".
El periodista agrega que en las próximas semanas "estoy seguro" se conocerán los nombres de otros militares de alto rango involucrados; también de empresas fraudulentas que pese a estar señaladas en la investigación, "siguen siendo proveedores del Ejército".
Caiga quien caiga
El ministro de Defensa, José Antonio Gómez, se refirió al caso asegurando que "aquí la situación que hemos establecido es caiga quien caiga", reseña el sitio PubliMetro.
En opinión del ministro, lo único nuevo es que el caso se hizo público "pero se está investigando hace mucho tiempo. Y lo que se ha conocido no es a punta de denuncias periodísticas, sino que a través de denuncias del mismo Ejército".
Ernesto J. Navarro