EE.UU. quiere fabricar su propio rifle kaláshnikov
Según un anuncio publicado en un sitio web oficial de compras del Gobierno de EE.UU., los servicios especiales del país norteamericano buscan a potenciales fabricantes que puedan producir armas de diseño soviético "a partir de la tecnología y la base industrial nacional". Concretamente el anuncio se refiere a las principales modificaciones de las armas de fuego ligeras producidas en serie en la URSS después de la Segunda Guerra Mundial.
La lista, que encabeza el legendario rifle AK-47, incluye también el RPK (ametralladora de mano Kaláshnikov), la ametralladora ligera Degtiariov (RPD), la de gran calibre Vladímirov (KPV) y el fusil de francotirador Dragúnov (SVD), entre otros. La tarea, tal y como se plantea, pone en tela de juicio que los militares estén dispuestos a respetar los derechos relacionados con la producción de las armas de diseño extranjero.
"Mediante esta solicitud estamos explorando las capacidades de nuestra base industrial para fabricar las clases de armas que usan muchos de nuestros socios extranjeros", explicó el portavoz del mando, Matt Allen, en un correo electrónico enviado a la redacción de 'The Washington Post'. El mantenimiento técnico de las armas estadounidenses puede ser más complicado que el de las rusas, por lo que sería muy lógico proporcionar las armas americanas a los aliados, agrega el diario.
Los periodistas admiten que, enviando a oriente Medio armas de fabricación estadounidense, Washington puede afrontar problemas que preferiría evitar. Así, recientemente los grupos de insurgentes sirios respaldados por EE.UU. fueron sorprendidos con ametralladoras pesadas y rifles de francotirador, que Washington oficialmente solo vende a Gobiernos como el iraquí. Además, esos mismos grupos pueden convertirse en "objetivos para otras facciones".