¿Propaganda del terror? Arrestan en Turquía a eminentes activistas de Reporteros Sin Fronteras
Las autoridades de Turquía han arrestado a tres activistas participantes en una campaña mediática de solidaridad con el periódico prokurdo 'Ozgur Gundem' ('Agenda libre'), un medio muy perseguido por Ankara en los últimos meses.
Los arrestados son Erol Onderoglu, representante en Turquía de la organización internacional no gubernamental Reporteros Sin Fronteras, Ahmet Nesin, corresponsal de la misma ONG, y Sebnem Korur Fincanci, la presidenta de la Fundación de los Derechos Humanos de Turquía. A los tres se les han presentado cargos de 'propaganda del terror' y ahora se encuentran en custodia.
Según informa 'Deutsche Welle', un total de 51 personas han participado en esta campaña de apoyo, que por primera vez atrajo la atención policial el mayo pasado. Aparte de los tres arrestados, las autoridades turcas iniciaron investigaciones contra 37 personas. Cinco editores involucrados fueron interrogados este lunes y a continuación puestos en libertad.
En un comentario concedido al medio alemán, el abogado Veysel Ok, defensor de la ONG Plataforma por el Periodismo Independiente (P24), señaló que uno de los presos fue arrestado simplemente por ser representante de Reporteros Sin Fronteras, otro por trabajar en cuestiones relacionadas con los derechos humanos y el tercero "por razones simbólicas", puesto que es hijo de un famoso escritor turco. Estos arrestos "no son mera coincidencia", dijo Ok agregando que el Gobierno de Recep Tayyip Erdogan "no tolera ni siquiera la solidaridad".
Debido a las vacaciones judiciales que comienzan en Turquía el 20 de julio, los tres activistas pueden permanecer detrás de las rejas al menos hasta el septiembre, supuso el mismo letrado.
La persecución de 'Ozgur Gundem' y sus simpatizantes no es el único caso de castigo de periodistas por parte de las autoridades turcas. A principios de mayo Can Dundar y Erdem Gul, del diario 'Cumhuriyet', fueron acusados de "revelar secretos de Estado" y condenados a seis años de prisión por un tribunal de Estambul.