Conray Murray fue el médico personal que atendió a Michael Jackson durante sus últimos días. Fue declarado culpable de homicidio involuntario por la muerte de la estrella de la música pop en 2009 y cumplió una condena de cuatro años en prisión, aunque insiste en defender su inocencia.
Según el diario británico 'Daily Mail', una vez fuera de prisión, Murray ha realizado algunas declaraciones sobre el extraño comportamiento de Jackson respecto a su hijo. El médico reveló que el 'Rey del Pop' llegó al punto de pedirle que se mudara junto a su esposa y sus hijos a una habitación contigua. Según Murray, el cantante mostró una extraña obsesión por su pequeño hijo, Che, desde que lo conoció. Inclusive guardaba una foto suya en su habitación, "encima del piano de cola, donde podía verla todos los días".
El exmédico señaló que su comportamiento muchas veces se correspondía al de una persona "con la mente retorcida". Asimismo, indicó que nunca dejó solo a su hijo con Jackson debido a que "la madre del menor no lo hubiera permitido. Nunca".
Polémicas revelaciones
Sin embargo, Murray no cree que las fotografías de menores de edad encontradas en el rancho Neverland y que se hicieron públicas recientemente, hayan sido utilizadas con fines pornográficos. "Había muchas muñecas y fotografías que sus fanáticos le enviaban. Algunas las adquirió él mismo, pues las coleccionaba. Pero nunca vi que se usaran con fines sexuales. Era su manera de ser, su forma de vivir", aseguró.
Estas declaraciones coinciden con el lanzamiento de su polémico libro 'This is It', en el que Murray revela los detalles de su vida al lado del cantante.