Este jueves la ONU reconoció públicamente haber jugado un papel primordial en la epidemia de cólera que azotó a Haití en 2010 y que hasta el momento se ha cobrado unas 10.000 vidas, informó 'The New York Times'.
Farhan Haq, portavoz adjunto de la organización, acepta que no se tomaron las medidas suficientes para su erradicación y reconoce que la entidad pudo haber hecho mucho más para frenar la epidemia. "Era necesario hacer mucho más para frenar el brote inicial y el sufrimiento de las personas afectadas por el cólera", expresó Haq.
Las declaraciones fueron recibidas con gran aceptación por parte de los grupos de derechos humanos que trabajan con los miles de víctimas de la enfermedad. "Es una gran victoria para los miles de haitianos que se han movilizado para pedir justicia, que escribieron a la ONU y presentaron una demanda contra la organización", expresó Mario Joseph, un abogado activista que representa a los afectados.
Por su parte, Beatrice Lindstrom, del Instituto para la Justicia y la Democracia en Haití, citada por 'The Guardian', considera la acción como el "primer paso hacia la justicia". Sin embargo, Lindstrom que está llevando a cabo una demanda colectiva contra la ONU, busca que esta acepte toda la responsabilidad por el desastre y pague una indemnización, acción que el organismo internacional rechaza.