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La caza de tres conejos lleva a un indígena a la cárcel en México
"El caso muestra lo absurdo del sistema de justicia mexicano", según 'The Guardian'.
Acusado de supuestamente cazar tres conejos en su terreno, parte de una propiedad comunal, el indígena zapoteco Heliodoro Morales Mendoza lleva siete meses en prisión y podría enfrentar cargos hasta por 10 años.
"Su alegada ofensa no es corrupción, secuestro, tráfico de drogas o ser parte de una de las muchas facciones criminales que han extendido la sangría a través del país", dice el rotativo británico 'The Guardian'.
Morales supuestamente habría cazado tres conejos en su propio terreno, en el municipio de Tlacolula de Matamoros, parte de un régimen de bienes comunales, lo cual les daría autonomía a los pueblos indígenas. Este territorio también pertenece a una Área Natural Protegida por sus cuevas prehistóricas y se encuentra cerca de la zona arqueológica de Yagul. El supuesto crimen habría sucedido en 2012, cuando Morales trabajaba en un paraje en el que siembra maíz y frijoles.
Morales fue acusado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conamp) y ahora enfrenta cargos como portación de arma de fuego exclusiva del Ejército y delitos contra la biodiversidad, que son utilizados para proteger especies en peligro de extinción como jaguares y pumas.
Documentos de la corte muestran que otro miembro de la familia admitió haber disparado contra los conejos, pagó una fianza y el incidente fue olvidado por la familia.
En entrevista para RT, Ricardo Lagunes, abogado especialista en materia indígena e integrante del proyecto Defensa Legal Sureste, explica que los indígenas en México se enfrentan a irregularidades como detención arbitraria, sin orden de aprensión, supuestamente en flagrancia, la obtención de declaraciones incriminatorias, bajo tortura física y psicológica, se les aísla, incomunica, no se les proporciona en tiempo y forma defensor que conozca lengua y cultura ni intérprete.
“Por lo regular se aplica la ley de manera abstracta y no lo aterrizan al contexto social, cultural de la persona. La constitución lo señala pero por quizás prejuicios y prácticas discriminatorias esto no se toma en cuenta”.
El rotativo sugiere que el caso resalta "la inequidad" del sistema mexicano, en el que el 1% de los crímenes se castigan. Y ejemplifica con el escape de El Chapo Guzmán y el del exgobernador del estado norteño de Coahuila, Humberto Moreira, quien enfrentó cargos de lavado de dinero sin mayores consecuencias.
Además, el periódico británico destacó que algunos prisioneros pueden pasar años en la prisión sin tener sentencia, a pesar de que en junio el Gobierno mexicano introdujo reformas encaminadas a detener el abuso del tiempo que las personas pasan en prisión preventiva, así como el concepto de presunción de inocencia.
Morales, quien funge como regidor de seguridad en el municipio y perdió las elecciones para la presidencia de su municipio frente al actual edil, fue apresado por cuatro policías armados mientras trabajaba.
No alcanzó fianza (como el 41% de la población carcelaria), fue encarcelado en el penal de Santa María Ixcotel, y ahora sus abogados buscan un recurso legal que le dé beneficios por ser indígena, lo cual requiere de un dictamen antropológico que debe realizar la Comisión Nacional de Pueblos Indígenas y que tarda varios meses, reporta el diario 'El Universal'.
"De ninguna manera ha querido causar un daño o desequilibrio ecológico; si hubiera sido el caso, los conejos no son una especie en peligro de extinción; también, en muchas comunidades son cazados para alimento" contó a 'El Universal' Heliodoro Morales, hijo del detenido.
RT contactó a la Conanp para escuchar su versión. Prometieron ofrecer una entrevista, pero hasta la publicación de este texto no volvieron a responder.
Aldabi Olvera
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