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Una argentina devuelve un anillo de oro a su dueño 37 años después de que lo perdiera
Un español recién casado perdió su alianza de boda en el mar durante unas vacaciones en 1979 y ahora ha podido recuperarlo gracias a la casualidad y la honestidad.
Un anuncio publicado en Facebook y compartido por más de 80.000 internautas ha ayudado a un español llamado Agustín a recuperar un valioso objeto que perdió hace décadas. Se trata ni más ni menos de su anillo de bodas, que extravió en 1979, poco después de casarse, durante unas vacaciones en la ciudad mediterránea de Benidorm.
El pasado agosto una instructora de buceo detectó durante una inmersión cerca de la isla de Benidorm, frente a las costas de la ciudad homónima, un objeto que al principio tomó por una arandela pero resultó ser un anillo, informa el diario 'La Nación'. Ya en la superficie, Jessica Cuesta, una argentina residente en España, leyó en la parte interior de la sortija la fecha 17-02-1979 y el nombre Juani, unos datos que sin duda alguna se referían a la novia y el día de boda.
El primer anuncio publicado por Cuesta en la red social en agosto no trajo ningún resultado. Pero la submarinista estaba empeñada en devolver la alianza a su propietario y hace diez días volvió a publicar otro anuncio. Entonces insistió en su importancia y pidió a todo el mundo compartirlo. Varios medios españoles difundieron la historia, que rápidamente se viralizó.
Cuesta recibió mensajes de 300 personas que afirmaban haber perdido sus alianzas de boda, pero no estuvo convencida de haber encontrado al propietario del anillo hasta que recibió una llamada de Agustín. "Mire, yo me casé en esa fecha, soy de un pueblo de al lado", afirmó el hombre, que le dijo que su mujer se llama Juani, un dato que la argentina no mencionaba en su anuncio.
Además de confirmar la importancia que tienen los medios sociales en el mundo moderno, la historia tiene un componente medioambiental, como indica 'Clarín'. La instructora de buceo dijo a los periodistas que estaba levantando basura del fondo mar en la zona donde da clases de submarinismo porque le da "pena cómo ensucian el mar".
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