El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha pedido perdón ante la comunidad judía durante un festival transmitido en vivo por la televisión nacional. Duterte ha asegurado en su discurso: "Nunca he tenido la intención de menospreciar la memoria de los seis millones de hebreos asesinados", cita Reuters.
El mandatario ha recordado que en los días previos a sus polémicas declaraciones sus críticos se referían a él como un análogo o "primo" de Hitler, "que mató a muchas personas". El mandatario ha reiterado que el problema fue precisamente que muchos de sus críticos lo compararon con el líder nazi, y ha dicho que se disculpaba "profundamente".
El sábado un portavoz de la Presidencia filipina señaló que Duterte no quería elogiar a Hitler ni tomar el Holocausto como un modelo para su política de matar a los narcos. Según las declaraciones del vocero, esta política busca salvar "el futuro de las próximas generaciones del país", y que la experiencia del pueblo judío durante la Segunda Guerra Mundial fue "trágica y dolorosa".