¿Qué pasará si EE.UU. ataca blancos protegidos por Rusia en Siria?
El pasado 7 de octubre, Rusia decidió desplegar sus sistemas de defensa antiaérea S-300 en Siria después de conocerse una filtración que indicaba las intenciones de EE.UU. de atacar los aeródromos del Ejército sirio.
"Rusia considerará el ataque contra el Ejército sirio como un intento de interrumpir la operación antiterrorista en el país, algo que tendrá consecuencias. Mientras tanto muchos se dan cuenta de que para los sistemas S-300 no existen aviones invisibles", comentó el periodista y militar ruso Alexander Jrolénko a RIA Novosti.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, el general Ígor Konashénkov, aseguró respecto a esos sistemas que "todas las ilusiones de los aficionados sobre la existencia de aviones 'invisibles' se enfrentarán a una decepcionante realidad", en una posible referencia a los aviones furtivos estadounidenses de quinta generación F-22 y F-35.
"Los planes del Pentágono de ayudar a los militantes, a 'cerrar el cielo' sobre Siria, -eliminar físicamente al presidente Bashar Al Assad - no son factibles. Tras el fracaso del acuerdo de paz la 'oposición moderada siria' será destruida consecuentemente como el Estado Islámico y el Frente al Nusra inmoderados, aunque esto requiera una gran cantidad de tiempo y esfuerzos de parte de la República Árabe Siria y sus aliados. Rusia no tiene intención de dejar desamparada a Siria", afirma Jrolénko.
Un verdadero desafío para EE.UU.
En un nuevo artículo, el portal Business Insider analiza las capacidades militares de Washington y sus aliados frente a los avanzados sistemas rusos.
Según el citado portal, los complejos de defensa aérea rusos S-300 y S-400 en Siria "representan un verdadero desafío a la capacidad de EE.UU. para operar en esas zonas sin ser derribados".
El experto del Real Instituto de Servicios Unidos para Defensa y Seguridad de Londres, Igor Sutyagin, opina en el citado portal que Rusia "tiene roda la razón": 'stealth' en el sentido de 'invisibilidad' "solo es una invención para los aficionados, no es un término técnico". Sin embargo, este experto militar indica que los avanzados sistemas rusos también tienen algunas limitaciones.
De hecho, estos sistemas de defensa aérea están diseñados para interceptar objetivos de alto vuelo a una distancia máxima de unas 250 millas. Aunque ello representa una amenaza para aviones de EE.UU. y de la coalición que operan normalmente en la región, la defensa antimisiles "puede ser burlada" por aviones o misiles que vuelen a baja altura, revela el analista.
¿Qué aviones podrían intentarlo?
De acuerdo con Sutyagin, los aviones estadounidenses sigilosos –como el B-2, F-22 y F-35– podrían, "en teoría", noquear a los sistemas rusos en Siria, pero no sin combatir.
Su táctica se basa en crear brechas en el rango de radar y luego acercarse a través de este hueco y lanzar armamento seguro, explica el analista. A estas alturas, los sistemas de defensa rusos "lo detectarán inevitablemente, pero tal vez demasiado tarde", señala Sutyagin, quien hace hincapié en que el disparo de un misil no siempre significa un éxito y la detección de un misil no siempre significa interceptarlo.
"No hay una fiabilidad del 100%", pero será "mucho más difícil" para los sistemas de misiles tierra-aire rusos interceptar misiles disparados desde aviones furtivos de EE.UU. que puedan acercarse y localizar el sitio primero y más aún si utilizan un arma de baja visibilidad, puntualiza Sutyagin.
¿De qué dependerá el desenlace?
Por todo ello, EE.UU. podría superar las defensas rusas o Rusia podría derribar aviones de EE.UU. de quinta generación en Siria.
A juicio de Sutyagin, la situación es "muy complicada" y "no hay solución fácil para suprimir la defensa aérea", pero "hay oportunidades". En opinión del experto, mucho dependería de la formación y la experiencia de los pilotos.
Los pilotos de aviones estadounidense de quinta generación se encuentran entre los mejores del mundo, "pero los aviones y los sistemas de misiles tierra-aire luchan en el aire, sobre los mares, y en la tierra, no sobre el papel", recuerda el artículo. En él se agrega que cada escenario de combate presenta desafíos y oportunidades únicas que pueden beneficiar a un lado u otro.
"Si los pilotos estadounidenses no son experimentados en sus aviones de quinta generación, serán derribados. Si son brillantes, operativa y tácticamente, van a derrotar [a sus rivales]", concluye Sutyagin.