Rusia prueba con éxito su "asesino de portaaviones"
Los P-700 Granit, misiles de crucero supersónicos antibuque de fabricación rusa, fueron probados con éxito el pasado 16 de octubre en la isla Séverny, en el archipiélago septentrional ruso de Nueva Zemlyá, en el marco de los preparativos anuales de la Flota del Norte, informa la agencia rusa FAN.
"Los misiles supersónicos Granit fueron disparados desde posiciones submarinas a altas latitudes del mar de Barents [Océano Ártico]. Por primera vez se efectuaron disparos contra objetivos complicados ubicados en el interior de la costa de la isla Séverny", anunció el portavoz de la Flota del Norte, el capitán Vadim Segra.
Esta maniobras militares forman parte del proyecto de submarinos nucleares 949A diseñado para la lucha contra navíos enemigos, principalmente contra grupos de portaaviones. Para ello, los submarinos como el K-410 Smolensk, que corrió a cargo de los ensayos del pasado domingo, están equipados con los misiles de crucero P-700 Granit, conocidos coloquialmente en Rusia como "asesinos de portaaviones" debido al objetivo con el que fueron creados.
La característica primordial de estos proyectiles, además de contar con un alcance de 700 kilómetros, reside en la gran velocidad y potencia de sus ojivas, además de permitir la gestión de su trayectoria y de seleccionar automáticamente sus objetivos, sirviendo también para completar maniobras antiaéreas. La posibilidad de alcanzar objetivos en tierra era una característica de estos misiles que no se había confirmado de forma oficial hasta ahora.