Después de una serie de decisiones tomadas en las cumbres de la OTAN en Gales y Varsovia, la Alianza del Atlántico Norte ha cambiado drásticamente su política en cuanto a Rusia, según el representante permanente ruso ante la OTAN, Alexánder Grushkó. "Donde había cooperación ahora tenemos un proceso de involucración en una carrera armamentística iniciado por los países de la OTAN", dijo en una videoentrevista con Deutsche Welle.
"¿Qué vemos ahora? Un reforzamiento de las actividades de la OTAN en Europa oriental. Es un plan de EE.UU.", ha explicado el diplomático ruso. El representante permanente ha destacado que también hay que tener en cuenta la Iniciativa de Reaseguro Europeo de la OTAN (ERI, por sus siglas en inglés), según la cual EE.UU. desplegará una brigada en Europa oriental , así como armas pesadas (incluyendo tanques y sistemas de artillería) en tres países de Europa occidental: Alemania, Bélgica y Países Bajos.
En respuesta al entrevistador, que culpó a Rusia de las tensiones en sus relaciones con Occidente, y especialmente de la crisis de Ucrania, Grushkó ha asegurado que la "crisis sistémica de la arquitectura europea de seguridad empezó mucho antes". "Cooperábamos, sí, es verdad. ¿Pero qué tenemos ahora? Ante todo, no tenemos base común con los países de la OTAN que formaban parte de una serie de proyectos muy importantes con los que nos enfrentábamos a retos y amenazas como el narcotráfico de Afganistán", ha apuntado.
Hablando en el contexto de las relaciones entre Rusia y la OTAN, el diplomático ha destacado que hoy "existen intentos de aislar a Rusia, construir un nuevo telón de acero en Europa usando medios militares, económicos e informativos". Esto constituye un "gran alejamiento de los principios previamente acordados", en particular, del principio básico según el cual no se puede dividir la arquitectura de seguridad, ha concluido.