China ha construido su segundo portaaviones —el primero de ese tipo de completamente de fabricación nacional— y ya está instalando el equipamiento de la nave, según ha informado el portavoz del Ministerio de Defensa chino, Wu Qian, y publica 'South China Morning Post'.
Hace cuatro años, China ya desarrolló el 80 % de su primer portaaviones, un antiguo buque soviético Variag que adquirió a Ucrania en los años 90 a precio de chatarra y bautizó como Liaoning, indica TASS.
Esta segunda nave tiene prácticamente el mismo diseño exterior, según la imagen satelital que en julio mostró la revista estadounidense Jane's Defence Weekly. Es posible que ello se deba a que, en los años 90, el gigante asiático compró toda la documentación pertinente a la oficina de diseños rusa Nevski PKB.
Muchos analistas estiman que este nuevo portaaviones forma parte del esfuerzo de China para defender sus intereses en el extranjero; en especial, para afrontar las disputas territoriales en el mar de la China Meridional.