Con el 99,98% escrutado, el republicano Donald Trump se ha convertido en el candidato ganador en Florida, uno de los estados clave, tras conseguir un 49,1% de los votos. El 47,7% de los electores ha votado por la demócrata Hillary Clinton.
Si bien hay muchos estados donde tradicionalmente gana siempre el mismo partido, en los 'swing states' –estados pendulares o bisagra– los resultados varían de elección a elección. De ellos el que más compromisarios asigna es Florida (29), lo que explica su importancia para los resultados de las presidenciales.
Trump gana en el estado clave de Ohio
Asimismo, según los últimos resultados ya está asegurada la victoria del republicano en otro estado importante, Ohio (18 compromisarios), donde habría conseguido más del 52,8% del apoyo popular contra el 42,8% a favor de Hillary Clinton.
La carrera electoral va 216 a 197 a favor de Trump.
Los estados pendulares y las definiciones de Florida
El sistema electoral estadounidense es indirecto. Es decir, que lo que eligen los votantes de cada estado son miembros para el Colegio Electoral que, una vez que se conforma, elige al futuro presidente. De esta manera, más allá del porcentaje total de votos emitidos por la población, lo que cuenta en última instancia son cuántos electores sacó cada candidato.
Por este motivo algunos estados se vuelven claves en cada elección. En primer lugar porque a excepción de Maine y Nebraska, el candidato presidencial que gana un estado se lleva todos los votos electorales, ya que no rige un sistema proporcional. Una mínima diferencia de votos en un distrito disputado puede significar un cambio rotundo en el resultado final.
Históricamente los votos que más varían son los de Florida, Pensilvania (que tiene 20 electores) y Ohio (con 18). En esta elección se suma también Carolina del Norte, con 15 electores. Para lograr ser electo presidente, son necesarios 270 votos en el Colegio Electoral, por lo que la victoria en alguno de estos estados donde el ganador se lleva todo, puede definir la elección.
Florida ha sido un estado clave en al menos dos elecciones recientes. La más recordada es, sin dudas, la que en el 2000 le dio la victoria a George W. Bush sobre Al Gore por apenas 537 votos. Sin embargo también el propio Barack Obama venció a Mitt Romney en Florida por menos del 1%, poco más de 70.000 sufragios.