La Policía de California ha reportado que el tirador que el día de las elecciones de EE.UU. mató a una persona e hirió a otras dos cerca de un colegio electoral en la ciudad de Azusa, en Los Ángeles, probablemente se encontraba bajo los efectos de la cocaína o la metanfetamina, informa el periódico 'Los Angeles Times'.
De acuerdo con el teniente de coronel del condado de Los Ángeles, John Corina, el pistolero había estado consumiendo cocaína o metanfetamina cuando se armó con varias pistolas, salió a la calle y abrió fuego.
El agresor, que solía contar a sus familiares que había servido en el Ejército, era un "fanático de las armas" que se drogó al menos un día antes del ataque, lo que llevó a su esposa y sus dos hijos a abandonar el domicilio familiar el lunes por la noche "porque perdía el control", dijo Corina.
Tras el tiroteo, dos mujeres de 65 y 59 años fueron hospitalizadas en estado crítico. La víctima mortal, un hombre, falleció en una ambulancia camino del hospital. El tirador fue abatido por la Policía.