Cada vez que el candidato republicano, Donald Trump, se precipitaba al vacío durante la campaña electoral y su rival demócrata, Hillary Clinton, se acercaba a la Casa Blanca, tres mujeres salían a su rescate para evitar el descalabro del magnate multimillonario. Su papel no fue fácil, pero consiguieron dirigir al republicano a la victoria en las elecciones presidenciales.
Hablamos de la poderosa donante republicana Rebekah Mercer, la directora de su campaña, Kellyanne Conway, y su portavoz, Katrina Pierson. "Se pueden albergar dudas razonables de que el presidente electo de EE.UU. haya respetado siempre a las mujeres, pero no hay ninguna de que hay tres a las que sí ha hecho caso. A dos de ellas, además, las ha obedecido", explica el periodista Lluis Amiguet en un artículo publicado en 'La Vanguardia'.
Rebekah Mercer, la 'megadonante' republicana
Probablemente, la poderosa mecenas ultraconservadora Rebekah Mercer, hija del emprendedor digital Bob Mercer, es la mujer más poderosa que rodea directamente a Donald Trump. De hecho, esta mujer de 42 años graduada en ingeniería y matemáticas por Stanford, formará parte del equipo de transición del presidente electo.
La familia Mercer no siempre ha sido multimillonaria. Bob Mercer, un ingeniero que trabajó para IBM, logró amasar una gran fortuna en Wall Street gracias al fondo Renaissance Technologies. Desde entonces, han sido grandes donantes del partido republicano.
The ONE woman that controls the Trump campaign. Meet Rebekah Mercer...a real Billionaire. She owns Trump!! LOL pic.twitter.com/akxIAKGHUJ— Mary (@lovealaska1105) 30 de octubre de 2016
Rebekah es una fiel defensora de la pena de muerte, la libre posesión de armas de fuego, los combustibles fósiles, la prohibición del aborto, así como una negacionista del cambio climático. Hace dos años abandonó su carrera de analista de riesgos en Wall Street para dedicarse a sus cuatro hijos y a la política.
En este sentido, ha donado miles de dólares al partido republicano con el objetivo principal de evitar que Hillary Clinton alcanzara la presidencia de EE.UU. Incluso, y a pesar de defender con fervor al senador Ted Cruz durante las primarias del partido, no dudó en apoyar a Trump en el momento en el que fue elegido candidato republicano a la Casa Blanca.
Sin embargo, Rebekah ha vigilado muy de cerca la campaña electoral. De hecho, cuenta el citado medio, que el día que el republicano acusó a los mexicanos de "enviar violadores a EE.UU.", la 'megadonante' amenazó con dejarle sin fondos "si no cambiaba de estrategia y controlaba sus impulsos".
Kellyanne Conway, la analista de encuestas y estratega
Algunos medios de comunicación han señalado a Kellyanne Conway, la directora de campaña de Trump, como la gran artífice de su victoria. A sus 49 años, Conway, casada con un abogado republicano que participó en la campaña de 'impeachment' contra Bill Clinton, tomó las riendas del partido el pasado mes de agosto tras los escándalos que hicieron bajar drásticamente la popularidad del republicano en los sondeos.
Según un artículo publicado en 'The Guardian', Conway dio un toque femenino a la campaña del magnate y le dio "una cara aceptable en medio del machismo furioso". La nueva jefa dispersó por la televisión todas las críticas acerca del candidato "con una sonrisa soleada y una insistencia continua de que "Trump tiene una visión positiva para [los Estados Unidos de] América".
Incluso, tras el escándalo de la grabación en la que Trump vertió comentarios denigrantes sobre las mujeres, la directora de su campaña mantuvo la calma. En vez de defender de inmediato al candidato, canceló su aparición en los programas previstos para aquella noche, y volvió al público con el mensaje en el que tachaba los comentarios de "horribles e indefendibles", pero se mostraba "feliz" de que Trump se hubiese disculpado.
Gracias a su habilidad de "enviar mensajes codificados" a las mujeres y convencerlas de quedarse con Trump, a pesar de las acusaciones de abusos sexuales hechas contra él, Conway se ha convertido en la primera mujer en EE.UU. en llevar a buen puerto una campaña presidencial.
Katrina Pierson, la hija de un afroamericano
La tercera mujer que ha influido claramente para conseguir la victoria del candidato republicano ha sido su portavoz, Katrina Pierson, la cara más conocida de la campaña de Trump ante los medios de comunicación.
Esta mujer de origen tejano y 39 años de edad, hija de un hombre afroamericano y una madre blanca, ha utilizado el mismo tono agresivo del magnate, e incluso, declaraciones más controvertidas.
En 2008, votó por el presidente saliente de EE.UU., Barack Obama. Por ello, su mérito radica en haber conseguido que el gran público estadounidense, incluida la población negra e hispana, se haya habituado a los comentarios del magnate, hasta considerarlos, de alguna manera, aceptables.
Las tres han realizado un enorme trabajo por evitar el descalabro de Trump llevándole la contraria en cada uno de los desafortunados comentarios que el magnate hizo durante la campaña electoral.
María Jesus Vigo Pastur