EE.UU. gastó 585 millones de dólares en 2016 para "promover la democracia" en el mundo
EE.UU. invirtió 585 millones de dólares el último año para "promover la democracia" en todo el mundo, reveló un informe financiero del Departamento de Estado de EE.UU. para el año fiscal de 2016. Según el documento, los activos totales del Departamento de Estado equivalieron a 93.800 millones de dólares en el mencionado periodo fiscal, que finalizó el 30 de septiembre, aumentando en 3.200 millones de dólares en comparación con 2015.
El informe no especificó los proyectos financiados por la agencia en el exterior, pero el secretario de Estado, John Kerry, escribió en el prefacio que EE.UU. "ha apoyado importantes avances democráticos en Sri Lanka, Nigeria y Birmania". Kerry también subrayó que "EE.UU. se enfoca en el fortalecimiento de asociaciones con la sociedad civil, movimientos ciudadanos, líderes religiosos, empresarios y emprendedores, entre otros, para promover la democracia, el buen gobierno y enfrentar la violencia de género".
Asimismo, los autores del informe explican que el Departamento de Estado promueve los valores democráticos porque "las democracias estables son menos propensas a representar una amenaza para sus vecinos o para Estados Unidos".
"Para la actividad en Rusia"
En septiembre, antes de las elecciones parlamentarias rusas, la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID), cuya actividad está prohibida en Rusia, subvencionó con 3 millones de dólares a ONG rusas para "la actividad en Rusia", según su reporte publicado en el portal US Spending.
En mayo, el presidente ruso Vladímir Putin firmó un proyecto de ley que prohíbe las actividades de grupos extranjeros que representen una amenaza para la seguridad nacional o la capacidad de defensa de Rusia. La Fundación Soros, la Fundación Nacional para la Democracia de EE.UU. y el Instituto Republicano Internacional, del senador John McCain, se encontraban entre las organizaciones calificadas de "ilegales" para operar en Rusia.
Además, Vladímir Putin criticó a Washington por sus intentos de democratizar países extranjeros a través de medios militares u otras formas.
"Siempre he sido de la opinión de que no se puede cambiar las cosas desde el exterior, con respecto a los regímenes políticos, o el cambio de poder", afirmó Putin en septiembre. "Estoy seguro, y los acontecimientos de la última década comprueban esta certeza, en particular los intentos de democratización de Irak, Libia, vemos a lo que condujeron: la destrucción del sistema estatal y el surgimiento del terrorismo", sostuvo.