El presidente electo de EE.UU., Donald Trump, ha arremetido a través de su cuenta de Twitter contra la política monetaria y militar de China.
"¿Nos preguntó China si era correcto devaluar su moneda (lo que dificulta a nuestras empresas competir), gravar fuertemente con impuestos nuestros productos en su país (EE.UU. no los grava) o construir un complejo masivo militar en el centro del mar de la China Meridional?", escribió el magnate neoyorquino en su cuenta de Twitter.
"¡No, no lo creo!", subrayó el multimillonario.
China es a menudo blanco de las críticas de Trump
Durante la campaña electoral, el multimillonario acusó a Pekín de la pérdida de empleos en Estados Unidos y prometió subir los aranceles de las importaciones chinas hasta el 45%. El republicano también ha prometido que declarará a China como manipulador de divisas en cuanto llegue a la Casa Blanca.
Respuesta de China a las amenazas de Trump
Pese a las críticas, el gigante asiático está convencido de que la repatriación de empresas prometida por Trump en campaña podría resultar provechosa para Pekín, ya que su producción ganaría espacio en el mercado internacional.
Entre las compañías que resultarían afectadas por esta medida figura Apple, a la que le ofrecieron importantes beneficios para "construir una gran planta" en EE.UU., pese a que no podrá replicar el sistema de producción asiático. Los expertos advierten que ello dispararía los costos de los 'smartphones', por ejemplo, mientras que marcas chinas como Huawei y Xiaomi conseguirían quedarse con parte del mercado de Apple.
Trump sería un "tonto ingenuo"si decidiese lanzar una guerra comercial total contra China, según el diario chino 'The Global Times', controlado por el Partido Comunista chino. La publicación añade que la introducción de cualquier arancel nueva provocaría "contramedidas" inmediatas y un enfoque de "ojo por ojo" por parte de Pekín.