La Asamblea General de la ONU exige el cese de hostilidades en Siria y el asedio de Alepo
Además, ha instado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a tomar medidas que pongan fin al derramamiento de sangre, informa la agencia TASS.
La resolución correspondiente fue aprobada este viernes por mayoría. 122 países se pronunciaron a favor de la adopción del documento, 13 en contra, incluyendo Rusia, Venezuela, Bielorrusia, China, Bolivia, Nicaragua, Corea del Norte, Irán y Siria, mientras que otros 36 se abstuvieron.
El impulsor de esta resolución fue Canadá. La iniciativa exige poner fin a los combates en Alepo, así como levantar el bloqueo de las ciudades y permitir acceso a los organismos humanitarios.
Una resolución con "serias deficiencias"
En su intervención ante la Asamblea General de la ONU, el representante ruso ante las Naciones Unidas, Vitali Churkin, dijo que esta resolución "tiene serias deficiencias". Según el diplomático, el texto "identifica incorrectamente las causas del origen y desarrollo del conflicto en Siria", así como también "las acusaciones contra el Gobierno sirio superan los límites".
Según el diplomático ruso, en la resolución "no se hace mención a los problemas claves de la disociación de la llamada 'oposición moderada de los terroristas', y no se tiene en cuenta la evolución de las últimas semanas en Alepo".
Churkin además recordó que Rusia a petición de Siria ayuda a combatir a los terroristas que llegaron al país árabe desde "todas partes", para, según las "instrucciones recibidas, derrocar al gobierno legítimo sirio". Según el representante permanente ruso, el avance de los extremistas fue posible gracias al amplio apoyo financiero y logístico obtenido desde fuera de Siria, sin embargo, "la ilusoria concepción de la así llamada ‘oposición moderada’ prácticamente ha fracasado".
La Asamblea General de la ONU ha tomado una decisión "muy injusta"
Por último mencionó que el conflicto sirio ha sido el resultado de la imprudente política exterior "de algunas potencias y países regionales, a las que un día se les ocurrió derrocar al gobierno de Damasco y redibujar el mapa político, étnico y económico" de Oriente Medio.
A su vez, el representante sirio ante la ONU, Bashar Jaafari, calificó la resolución de "muy injusta", y señaló que a los países que apoyaron su aprobación no les preocupa en absoluto la situación en la que se encuentra el pueblo sirio. Además agradeció a las naciones que votaron en contra y prefirieron respetar "el lado del derecho internacional" y "no se convirtieron en títeres de otras" potencias.
Anteriormente Rusia y China vetaron un proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre Alepo, propuesto por Egipto, España y Nueva Zelanda. El proyecto suponía el alto el fuego en esa ciudad siria durante una semana. Sin embargo, la resolución adoptada por la Asamblea General, a diferencia del Consejo de Seguridad, no es vinculante, señala la agencia RIA Novosti.