El 'lado oscuro' de los Cascos Blancos: 5 cosas que debería saber de los 'defensores civiles sirios'
La organización de voluntarios Cascos Blancos, que se dedica a la prestar asistencia a las víctimas del conflicto sirio, viene siendo una de las principales fuentes de todo tipo de acusaciones contra Rusia, incluidas matanzas de niños en bombardeos. Los Cascos Blancos, que aspiran a ser nominados para Premio Nobel de la Paz, recibieron este año el 'Premio Nobel Alternativo' denominado Right Livelihood. Sin embargo, en su historial no todo parece tan claro como su nombre indica.
No son la verdadera Defensa Civil en Siria
La verdadera organización de Defensa Civil en Siria fue creada a mediados del siglo pasado y forma parte de Organización Internacional de Protección Civil desde 1972. La organización de los Cascos Blancos, que luego adoptó el nombre de Defensa Civil Siria, fue creada a finales de 2012 y principios de 2013 como fuerza humanitaria alternativa y actúa en los territorios controladas por la oposición armada, sobre todo el Frente Al Nusra, vinculado con Al Qaeda. Afirman que "salvan gente de las dos partes del conflicto", pero, al parecer, esto no afecta a los leales al Gobierno sirio. Por ejemplo, en este video varios cascos blancos se entremezclan con miembros de la banda armada que captura a un "cerdo de Assad".
La página web de los 'Cascos Blancos' pertenece al grupo de abogacía The Syria Campaign, registrada en Reino Unido, que expresa directamente su repulsa contra el presidente sirio Bashar Al Assad y contra el Estado Islámico. El grupo informa que cuenta con dos líneas de actuación: la creación de campañas por todo el mundo y la creación de "reportes, infografías y videos".
Escenifican con maestría videos de rescates
Los Cascos Blancos protagonizan y difunden en las redes numerosas pruebas de asistencia a niños y, en general, a civiles sirios afectados por supuestos bombardeos y ataques con misiles de las fuerzas armadas sirias y rusas, que luego son difundidos con entusiasmo por los medios occidentales. Sin embargo, muchas de estas 'evidencias' acaban siendo luego desmentidas. Por ejemplo, un video donde dos cascos blancos sacan de los escombros a un hombre herido que solloza de dolor parece completamente verosímil, salvo por el hecho de que, en realidad, es una simulación, reconocida por sus autores, la Oficina Mediática de las Fuerzas Revolucionarias de Siria (RFS, por sus siglas en ingles).
En los primeros 25 segundos del video sus protagonistas aparecen 'petrificados' en una pose, el 'herido' cubierto con polvo y con los ojos muy abiertos en expresión de dolor, junto a dos 'defensores civiles' que levantan escombros sobre sus pies, mientras la cámara se mueve, grabándolos en distintos planos en silencio absoluto. Pero, de repente, todo cambia, los tres empiezan a actuar y el escenario se llena de ruidos, gritos, se escuchan sirenas de ambulancia y, finalmente, los 'cascos blancos' levantan al herido y se lo llevan en brazos. Aquello fue su "intento de participar en el mannequin challenge internacional", explicó RFS
Dejando al margen la cuestión sobre la veracidad de la explicación y la moralidad de tal forma de participar en un 'flashmob' viral, el video deja en el aire una cuestión espinosa: si han podido escenificar perfectamente este video, ¿quién puede asegurar que las demás 'evidencias' de atrocidades no hayan sido igualmente falseadas?
Fueron grabados durante ejecuciones de Al Qaeda
Mucho más cuestionable es el siguiente video en el que un miliciano dispara dos veces a la cabeza a un joven arrodillado y con las manos atadas, se aleja, e inmediatamente después tres 'casco blancos' con una camilla urgen en levantarlo.
En varias fotos, 'selfies' o, por ejemplo, en este video, un casco blanco porta, por alguna razón, un fusil de asalto, pese a que la página web sostiene que su miembros son "neutrales e inermes". Los autores de ambos videos afirman que los 'defensores civiles' actúan mano a mano con Al Qaeda, grupo del que Al Nusra apenas se desprendió nominalmente.
Fundados por un exoficial militar británico, sospechoso de formar parte de inteligencia
Los 'Cascos Blancos' fueron fundados en 2013 en Turquía por James Le Mesurier, exoficial del Ejército británico que empezó a entrenar a los primeros 'defensores civiles' en Turquía. Graduado de la Academia Militar Real Sandhurst, sirvió en infantería durante campañas en Irlanda del Norte, Kosovo y Bosnia, después de lo cual pasó a trabajar en organizaciones humanitarias de la ONU, la UE y la cancillería de Reino Unido. Más tarde se integró en distintas consultoras como Good Harbor, del ex Coordinador Nacional para Seguridad y Contraterrorismo de EE.UU., Richard Clarke, y ARK en Emiratos Árabes Unidos.
those terrorists from #white_helmet were nominated for Nobel peace prize. this is so ridiculous.#syriapic.twitter.com/ZOx6GPDAEp
— AMEEN (@Ameen_media) October 11, 2016
El pasado mes de junio Le Mesurier fue condecorado por este trabajo con la Orden del Imperio Británico y es su Oficial (OBE), mientras algunas informaciones mediáticas sugieren que es oficial en funciones de la Inteligencia británica vinculado con Olive Group y Academi (ex Blackwater), la empresa militar privada de infame historial, y ha participado en conflictos en Irak, Líbano y Palestina.
Reciben donaciones millonarias de USAID y de gobiernos europeos
James Le Mesurier creó la fundación Mayday Rescue, a través de la cual los Cascos Blancos reciben una parte significativa de su financiación. Entre sus sus donantes principales figura la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), que afirma que les asistió con más de 23 millones de dólares. En marzo de 2015 el Ministerio británico de Exteriores reconoció que había prestado ayuda a grupos de defensa civil siria, que EE.UU., Dinamarca Japón eran sus otros donantes, y reveló que iba a 'regalar' otros 3,5 millones de libras esterlinas en forma de equipamientos. Investigaciones mediáticas mencionan también otras fuentes de financiación de los Cascos Blancos, entre ellas organizaciones vinculadas con el magnate estadounidense George Soros.