WikiLeaks recibió documentos secretos del Bundestag no a través de un ataque de supuestos 'hackers' rusos en 2015, sino de un empleado del Parlamento alemán que los pudo haber filtrado, según el portal Tagesschau que, a su vez, cita fuentes del diario 'Spiegel'.
Las citadas fuentes basan sus conclusiones en el hecho de que WikiLeaks publicó 90 gigabytes de datos, mientras que en el ataque cibernético ocurrido el año pasado contra el Bundestag solo fueron robados 16 gigabytes de información.
El pasado uno de diciembre WikiLeaks publicó una serie de documentos confidenciales de la comisión parlamentaria alemana que investiga las actividades de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE.UU. en el país. Entre las filtraciones hay documentación que constata la estrecha cooperación entre la NSA y la inteligencia alemana, que causó un escándalo en 2015.
Según los investigadores del caso, la filtración se debió a un empleado o un diputado del Parlamento germano. El presidente del Bundestag, Norbert Lammert, ha ordenado recientemente una investigación por violación de secreto profesional.
El medio alemán 'Frankfurter Allegemeine Sonntagszeiting' reportó citando a una fuente en los servicios secretos que WikiLeaks recibió los documentos gracias a un ataque de supuestos 'hackers' rusos contra el Bundestag en 2015. Cuando se produjo ese ataque, las autoridades alemanas afirmaron que los piratas no lograron acceder a información confidencial, mientras que el Ministerio de Interior no confirmó que fueran 'hackers' extranjeros.