'iPad' al estilo norcoreano: La tableta sin WiFi ni Bluetooth que 'espía' a sus usuarios
La conferencia anual sobre 'hacking' Chaos Communication Congress, que se celebra en la ciudad alemana de Hamburgo desde el 27 hasta el 30 de diciembre, ha sorprendido a sus participantes con la presentación de una tableta procedente de Corea del Norte llamada Woolim.
El hardware de este dispositivo, que funciona en base a Android, está fabricado por la empresa china Hoozo y no tiene ni WiFi ni Bluetooth. Estas aplicaciones fueron eliminadas por el Gobierno norcoreano, que instaló su propio software en la tableta, según informa el portal Motherboard, que habló con Florian Grunow, uno de los informáticos que tuvo acceso al invento.
Los especialistas sostienen que el modelo es de fabricación reciente y podría datar de 2015. La tableta contiene textos en formato PDF con instrucciones de uso, textos propagandísticos, algunas aplicaciones educativas –como diccionarios de francés, ruso y chino o un programa que enseña a los niños a escribir– y también ofrece acceso a la televisión local. Además, permite conectarse al internet norcoreano y cuenta con una versión adaptada del juego Angry Birds.
No obstante, los usuarios no pueden abrir cualquier tipo de archivo en la tableta, sea HTML o de texto, explica Grunow. Cada vez que tratan de hacerlo, el dispositivo comprueba su firma criptográfica, y no abre nada que no sea un producto de la propia tableta (por ejemplo, una foto) o aprobado por el Gobierno.
New from #33c3: here's Woolim, North Korea's totalitarian Android tablet. Locked down; can only run sanctioned files https://t.co/ryXtCXJpeLpic.twitter.com/PoTLHlAAmC
— Joseph Cox (@josephfcox) December 27, 2016
Las acciones de los usuarios tampoco pasan desapercibidas: cada vez que abren una aplicación, Woolim los espía al hacer de manera automática una captura de pantalla. Estas capturas de pantalla no pueden ser borradas luego pero se pueden ver a través de otra aplicación. "Es un mensaje claro: vemos todo lo que están haciendo", comenta Grunow, refiriéndose a la constante vigilancia gubernamental.