Varios civiles, incluidos niños, podrían haber muerto durante un ataque de EE.UU. en Yemen
Tras los extensos informes de víctimas causadas por el ataque del Ejército de EE.UU. contra Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP), que involucró misiles y ametralladoras de helicópteros, el Comando Central de las Fuerzas Armadas estadounidense ha reconocido que civiles, incluidos los niños, "probablemente habrían sido asesinados".
"Las posibles víctimas civiles parecen haber sido atrapadas en los disparos aéreos que fueron realizados para ayudar a las fuerzas estadounidenses", informa el Comando Central de EE.UU. en un comunicado.
Anteriormente las fuerzas estadounidenses se habían negado a reconocer que sus acciones hubieran podido causar muertes de civiles, asegurando que solo 14 militantes de AQAP fueron asesinados en el ataque en la provincia de Al Bayda. Un soldado estadounidense de operaciones especiales también murió y otros tres resultaron heridos en la operación sorpresa.
Sin embargo, los médicos de la zona rural de Yakla, en la misma provincia, han informado que unas 30 personas, entre ellas 10 mujeres y niños, murieron durante el ataque, informó Reuters. El mayor número de muertos (57, entre ellos 16 civiles, ocho mujeres y ocho niños) fue reportado por la agencia AFP.
La operación militar del domingo, ordenada por el presidente Trump, comenzó al amanecer con un ataque de aviones no tripulados a la casa de Abdulraoof al Dhahab, un alto líder de Al Qaeda.
Después del golpe inicial, a la zona fueron enviados helicópteros con agentes de fuerzas especiales de EE.UU. que asaltaron la casa. Los presuntos miembros de la célula terrorista respondieron con fuego. Los funcionarios de seguridad de Yemen y los habitantes locales han comentado que la confrontación duró alrededor de 45 minutos.