RT se adentra en el bastión del Ministerio de Defensa de Rusia
Seguridad de alto secreto, múltiples sistemas de vigilancia únicos y miles de expertos de rango elevado. El Ministerio de Defensa de Rusia es el bastión desde el que Moscú protege las fronteras y previene amenazas contra su territorio. RT ha tenido una oportunidad única de ver desde dentro cómo funciona y qué 'esconden' sus instalaciones.
La sede del Ministerio de Defensa ruso tiene uno de los mejores controles de seguridad del país, donde una simple tarjeta de identificación no es suficiente. Según ha revelado Denís Stupak, jefe de sección del Departamento Principal de la Policía Militar de Rusia, "un lector biométrico escanea la palma de la mano al detalle y el suelo de la entrada es en realidad una plataforma que calcula el peso".
Miles de cámaras vigilan cada rincón del edificio, así que pasar desapercibido es imposible. Además, el perímetro está rodeado por sensores que pueden detectar una contaminación biológica, química o radioactiva. El jefe del Centro de Control de Seguridad Integral, Dmitri Litvínov, ha aclarado que "el sistema rastrea todas las comunicaciones móviles en el complejo".
Los empleados también están bajo un control constante. Realizan un chequeo médico antes de cada turno laboral y un estricto control físico cada tres meses.
Los oficiales pueden ver con sus propios ojos y en tiempo real la labor de las fábricas militares a miles de kilómetros de distancia.
En particular, según ha revelado Víctor Sevostiánov, comandante del 4º Ejército de las Fuerzas Aéreas y Defensa Antiaérea de Rusia, "un dron de vigilancia Global Hawk despegó hoy de una base aérea en Italia". De esta manera, "cuando se acerque a 50 kilómetros de nuestra frontera, un caza de guardia nuestro despegará y lo escoltará hasta que abandone las inmediaciones de nuestro espacio aéreo", ha explicado.
Hoy en día los documentos ya casi no se imprimen, sino que son digitalizados. El Ejército tiene su propia versión de Internet, a la que está conectada cada unidad militar para transferir la información clasificada de manera rápida y segura. Tan solo desde este edificio se envían 40.000 mensajes electrónicos al día.
Aquí no solo no solo supervisan las actividades actuales, sino que también analizan y prevén el desarrollo de posibles guerras futuras con la ayuda de una supercomputadora. Utiliza la información de los conflictos pasados para prevenir los nuevos.
"Por ejemplo, la de Yugoslavia fue una operación a larga escala de la OTAN. Su armada, su despliegue de misiles, las localidades y las distancias... todo estaba sujeto a un análisis", ha señalado el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú. "Si la máquina dice que la situación se parece un 90% a lo que ocurrió en Serbia, sabremos que el escenario puede repetirse y tomaremos las medidas apropiadas", ha explicado el ministro ruso.
Dicen que el ordenador puede procesar el equivalente a 850 millones de libros por segundo. Y el Ejército ruso ha utilizado hasta ahora solo la mitad de su capacidad. Para los militares, todo esto es un día de trabajo común y corriente.