Los ejercicios militares Viking 2017, en los que intervienen tropas británicas, estadounidenses y noruegas, comenzaron el lunes en una región cercana entre Noruega y Rusia y se espera que duren hasta el 15 de marzo, informa el periódico High North News.
Según las Fuerzas Armadas noruegas, los objetivos principales de estos ejercicios son practicar la gestión de situaciones de crisis y mejorar la defensa del país escandinavo.
Las tropas movilizadas incluyen un total de 8.000 soldados, entre ellos 700 soldados del Cuerpo de Marines de EE.UU. y de los Reales Marines británicos. Antes de iniciar las maniobras, tanto británicos como estadounidenses participaron en unos ejercicios preparatorios con el objetivo de prepararse para las duras condiciones climáticas del Ártico.
#MeetYourArmy : Cpt. Thomas Huens, B Troop 1-91 CAV Cdr. Leads from the front testing the water in advance of his troopers. #JointVikingpic.twitter.com/lwgAtuo111— 173rdAirborneBrigade (@173rdAbnBde) 28 февраля 2017 г.
Las autoridades han prohibido el uso de drones en el espacio aéreo local mientras duren los ejercicios. "Las Fuerzas Armadas tendrán mucha actividad aérea, con la intervención de aviones de combate, helicópteros y aviones de transporte. Introdujimos la prohibición del uso de drones para garantizar la seguridad en el aire", informó el portavoz militar Ivar Moen a la estación de radio pública noruega NRK.
Como destaca el portavoz, este año Moscú fue avisado de los ejercicios de antemano. En 2015, las tropas de la OTAN participaron en otros ejercicios Viking en la región de Finnmark, que fueron vistos como una provocación por parte del Kremlin. Como respuesta, Rusia decicidió realizar unas maniobras militares a gran escala en la vecina península de Kola, en la región de Múrmansk.
El pasado mes de enero, cerca de 300 infantes de la Marina de Estados Unidos llegaron a Noruega para instalarse durante seis meses en la zona ártica del país.
Este despliegue acaba con un compromiso histórico de Oslo, que durante siete décadas se negó a albergar tropas extranjeras en su territorio. Este acontecimiento provocó serias preocupaciones en Rusia.
El aumento de la presencia militar de la OTAN en varios países europeos cercanos a las fronteras de Rusia proviene del miedo a la así llamada 'agresión rusa', que los líderes europeos vinculan con la crisis en Ucrania y la reunificación de Crimea con la Federación Rusa.