Las tensiones entre Caracas y el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), parecen no tener vuelta atrás.
Iniciando una nueva escalada de crispaciones diplomáticas, Luis Almagro difundió un documento este martes, en el que pide suspender a Venezuela de la OEA, a menos que celebren "elecciones generales completas a la mayor brevedad" y, en su opinión, deben estar supervisadas para garantizar que sean "libres, justas y transparentes".
Es el segundo intento del secretario por aplicar la máxima sanción a Venezuela. El 31 de mayo de 2016, invocó la Carta Democrática del organismo contra el gobierno chavista, con la intención de abrir un proceso que podría haber culminado en la suspensión del país. Ese pulso lo ganó Caracas.
El presidente Nicolás Maduro respondió duramente al contenido del nuevo informe, al que calificó como una "agresión del secretario general", y se refirió a Luis Almagro como "traidorcillo" e "inepto" y agregó que Venezuela "no se quedará de brazos cruzados ni callada (…) nadie nos amenaza, menos esta basura de ser humano", informó la estatal Venezolana de Televisión.
Otros episodios
Este cruce de declaraciones, entre el país caribeño y la OEA, no es el primero.
El 30 abril de 2007, el entonces presidente Hugo Chávez amenazó con retirarse del organismo, si este se pronunciaba sobre la decisión soberana de no renovar la concesión al canal Radio Caracas Televisión (RCTV).
Chávezvuelve a plantear la salida de Venezuela de la organización el 10 de mayo de 2010, como respuesta a un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que acusaba al país de incumplir con la defensa de esos derechos. Chávez los llamó "cínicos e inmorales".
Luego, el 5 de mayo 2012, Venezuela anuncia nuevamente que podría abandonar la CIDH, dependiente de la OEA, por haber reconocido al gobierno golpista que lo sacó brevemente del poder en el año 2002. Salida que se concretó en septiembre del 2012.
Salir o permanecer
Pero ante tantas discrepancias con el organismo y su actual secretario ¿es una opción para el gobierno bolivariano abandonar la OEA?
Entrevistado por RT, Freddy Gutiérrez, abogado y exrepresentante venezolano ante la CIDH estima que "Venezuela no abandona la OEA por una razón de carácter principista: la paz".
En su opinión, todos los enfrentamientos ocurridos son debates "sobre cuestiones precisas relacionadas con tratados internacionales que tienen su fundamento en la Declaración Americana, pero nadie (ningún país) ha tocado esa declaración".
Gutiérrez se refiere a la Declaración Americana (30 de abril de 1948) que establece los derechos esenciales de la OEA, para que los Estados puedan "tener una convivencia en paz". Un pacto hecho en el espíritu de la posguerra y anterior a la Declaración Universal de los Derechos del Hombre de Naciones Unidas.
El peso de Washington
Tensiones como la actual reviven viejas discusiones latinoamericanas sobre la aspiración de sacar a la OEA de territorio estadounidense.
"Creo necesario un cambio de sede de la OEA y la CIDH, porque el peso de Washington (en sus decisiones) es muy serio. Si hubiese un cambio de sede sería un giro importante para el funcionamiento de ambos organismos", indica Gutiérrez.
El abogado venezolano cree urgente que se trabaje en una "OEA diseñadade formadistinta a la actual".
Ernesto J. Navarro