El G-7 abordará en Italia una sesión especial sobre la situación en Siria
Este lunes comienza en la ciudad italiana de Lucca la reunión de cancilleres del G-7, formato que reúne a los siete países más industrializados del mundo, informa el sitio web dedicado a la presidencia italiana del grupo. El encuentro que se prolongará hasta el martes, anticipará la cumbre de los jefes de Estado y de Gobierno del G-7 en Sicilia (Italia) prevista para finales de mayo.
La agenda del encuentro de Lucca cubre todo el espectro de problemas internacionales: desde la lucha contra el terrorismo al desarrollo del programa nuclear de Corea del Norte pasando por la búsqueda de una solución a la situación en el este de Ucrania y Libia.
Algunos de los temas propuestos para la discusión:
- la amenaza terrorista;
- la seguridad de los Estados y
- la garantía de los derechos humanos de los refugiados y su posterior inclusión en las sociedades occidentales;
- el conflicto en Siria;
- la no proliferación de armas nucleares y el caso de Corea del Norte;
- las relaciones con Rusia;
- la crisis en Ucrania;
- la situación en Irak, la integración plena de Irán en la comunidad internacional;
- la seguridad informática.
Sesión especial
Este martes se espera una sesión especial sobre Siria al margen de la reunión en que, además de los cancilleres de los países integrantes del G7, participarán los jefes de la diplomacia de Turquía, Emiratos Arabes Unidos, Arabia Saudita, Jordania y Qatar, según RAI News.
La cuestión siria ha adquirido la actualidad política tras la reciente escalada militar en la región:
- EE.UU. lanzó este viernes 59 misiles de crucero Tomahawk contra la base aérea Shayrat del Ejército sirio. El ataque dejó muertos y heridos, incluidos civiles y niños.
- Washington justificó esa maniobra por el supuesto ataque con armas químicas ocurrido el 4 de abril en Jan Sheijun, en la provincia de Idlib (Siria), en el que habrían muerto entre 58 y 100 personas.
- Varios altos funcionarios de Rusia alegan que Washington adoptó esa medida antes de que se investigaran los hechos. El presidente Vladímir Putin y el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, declararon que el ataque se lanzó sobre la base de "una excusa ficticia".