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Palabra de presidente: líderes de EE.UU. que hicieron la guerra a pesar de las promesas de paz

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La tradición de olvidarse de las promesas de paz justo después de las elecciones ya se ha convertido en una constante de los líderes estadounidenses.
Palabra de presidente: líderes de EE.UU. que hicieron la guerra a pesar de las promesas de paz

Al dar la orden de atacar la base aérea siria en Homs el presidente de EE.UU., Donald Trump, rompió una de sus principales promesas electorales: no interferir en los conflictos de Oriente Medio y acabar con la aventura militar de EE.UU. El olvidar las promesas de paz justo después de las elecciones ya se ha convertido en una tradición de los líderes de EE.UU. Recordemos a los predecesores pacifistas de Trump, a quienes la Casa Blanca los volvió militaristas.

Lyndon B. Johnson y la Guerra de Vietnam

El 37º vicepresidente de EE.UU., Lyndon Baines Johnson, accedió a la Casa Blanca en 1963 tras el asesinato de John F. Kennedy. Un año después de su toma de posesión Johnson prometió al pueblo estadounidense que si era elegido para un nuevo mandato no interferiría en el conflicto armado que ganaba impulso en Vietnam.

"No vamos a enviar a los chicos estadounidenses a nueve o diez mil millas de su casa, para que hagan el trabajo que los chicos asiáticos deberían hacer por sí mismos", aseguró el presidente.

No obstante, un año después, EE.UU. comenzó a bombardear Vietnam del Norte, precedido por el despliegue de más tropas estadounidense en el sudeste de Asia. Como resultado, los efectivos de EE.UU. en Vietnam aumentaron desde los 20.000 bajo Kennedy hasta casi 540.000 al final del período presidencial de Johnson.

"No vamos a enviar a los chicos estadounidenses a nueve o diez mil millas de su casa, para que hagan el trabajo que los chicos asiáticos deberían hacer por sí mismos", aseguró el presidente.
El 36º presidente de EE.UU., Lyndon Baines Johnson

La invasión de Camboya de Richard Nixon

Como Donald Trump, el presidente Richard Nixon ganó la confianza de los estadounidenses en la campaña electoral con la promesa de terminar la muy impopular Guerra de Vietnam. Antes de su elección en 1968, los medios comenzaron a difundir mensajes sobre el "plan secreto de Nixon" para finalizar el conflicto. Sin embargo, en 1970 hubo un golpe de Estado en Camboya con el fin de debilitar la influencia de los comunistas, lo que llevó a la invasión de las tropas de Vietnam del Norte.

Nixon ordenó a los militares estadounidenses entrar en Camboya, que, a su vez, condujo a un aumento de la indignación y las protestas en EE.UU. Como resultado la retirada de las tropas estadounidense de Vietnam se completó en 1973.

Posteriormente los cercanos a Nixon negaron que el entonces mandatario hubiera mencionado algún "plan secreto", pero este caso entró en la historia de EE.UU. como uno de los ejemplos más llamativos del incumplimiento de las promesas presidenciales.

Reagan y el escándalo de Irán y los Contras

En 1986, el presidente Ronald Reagan dijo a los estadounidenses que su administración no transfería armas al Gobierno de Irán a cambio de rehenes estadounidenses. Según él, el dinero que armó a los guerrilleros nicaragüenses tampoco pertenecía a Washington.

"No intercambiamos, repito, no intercambiamos armas o cualquier otra cosa por rehenes y no lo vamos a hacer", dijo Reagan en un discurso en la televisión nacional.

Posteriormente se supo que este intercambio tuvo lugar, pero no fue autorizado por el Congreso de EE.UU., y el personal de la administración de Reagan destruyó un gran número de documentos, ocultando la culpa de los funcionarios y los oficiales.

Además, los 'contras' nicaragüenses, patrocinados por la administración de Reagan durante muchos años, estuvieron llevando a cabo actividades terroristas y diferente tipo de crueldad extrema no solo en relación a sus oponentes políticos, sino también a la población civil.

George W. Bush y la invasión de Irak

En el 2003, el presidente George W. Bush declaró en la cubierta del portaaviones Abraham Lincoln el fin de las operaciones de combate del Ejército de EE.UU. en Irak. El anuncio se produjo solo pocos meses después de la invasión. En el puente de mando, justo encima de la cabeza del mandatario, se podía ver una enorme pancarta con las palabras: 'Misión cumplida'. Sin embargo, la lucha continuó durante otros siete años.

Barack Obama, la guerra en Irak y Afganistán

En el 2008, Barack Obama prometió a sus seguidores a poner fin a la guerra en Irak y terminar con Al Qaeda en Afganistán, anuncio que a la postre le valió el Premio Nobel de la Paz.

"Vamos a poner fin a esta guerra en Irak. Traeremos a nuestros soldados a casa. Terminamos el trabajo en contra de Al Qaeda en Afganistán. Vamos a cuidar de los veteranos y restauraremos nuestra imagen en el mundo", dijo Obama durante la campaña electoral.

Sin embargo, en el 2016 el Pentágono anunció que el movimiento Talibán, contra el que fueron dirigidas las acciones militares en Afganistán, logró reconquistar al gobierno, respaldado por EE.UU., la parte más significativa del territorio del país desde el inicio de la invasión. Un año antes, el Departamento de Defensa de EE.UU. reconoció que el Ejército estadounidense siguió participando en los combates.

"Vamos a poner fin a esta guerra en Irak. Traeremos a nuestros soldados a casa. Terminamos el trabajo en contra de Al Qaeda en Afganistán. Vamos a cuidar de los veteranos y restauraremos nuestra imagen en el mundo"
El 44º presidente de EE.UU., Barack Obama

"Por supuesto, es una zona de guerra. En Irak hay una guerra, si no lo han notado. Y estamos aquí, y nos rodea por todas partes", dijo el portavoz del Pentágono, coronel Steve Warren, en octubre del año 2015. A pesar de que la administración de Obama había establecido un límite en el número de tropasde combate en Irak, Trump ha encontrado una manera de eludir estas reglas mediante el despliegue de nuevas unidades en Siria y Jordania.

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