"La mayor amenaza para la democracia de EE.UU. es su falso sistema de dos partidos, no Rusia"

El director del FBI señaló que Moscú representa "la mayor amenaza" para el proceso democrático de EE.UU. y definió a WikiLeaks como el "porno de la información de Inteligencia".

El hecho de que el máximo responsable del FBI considere que Rusia supone una amenaza a la democracia Estados Unidos es una "fanfarronería" diseñada para "ocultar" el fracaso de Hillary Clinton en los últimos comicios presidenciales estadounidenses, según ha explicado a RT Annie Machon, una exfuncionaria del servicio de inteligencia británica MI5.

Machon ha recordado que "nadie parece haber visto ninguna evidencia sólida" sobre el presunto 'hackeo' ruso y la supuesta injerencia de Moscú en las elecciones estadounidenses, unas acusaciones "refutadas una y otra vez" que lanzaron los partidarios de la candidata demócrata como "una especie de desviación" para tratar de "evitar rendir cuentas por el hecho de que, aparentemente, había utilizado de manera ilegal un servidor de correo electrónico privado".

Además, esta antigua empleada pública de Reino Unido ha valorado que las afirmaciones de Comey sobre WikiLeaks ponen de manifiesto el deseo de la Administración norteamericana de "procesar y juzgar" a Julian Assange "por todos los medios", pues "ha avergonzado" a EE.UU. al publicar información sobre "algunas de las cosas que realiza" ese país.

Esta especialista ha afirmado que WikiLeaks es, "en todos los sentidos", un editor de información que actúa "por el interés público", no solo con sus recientes revelaciones sobre la CIA o el Comité Nacional Demócrata (CND), sino por toda la información referente a la corrupción financiera, el extremismo derechista, el Grupo Bilderberg, los crímenes de guerra, las revelaciones de Chelsea Manning o la diplomacia estadounidense que ha publicado durante los últimos 10 años.   

En definitiva, Annie Machon considera que una de las mayores amenazas a la democracia de EE.UU. es "el sistema de dos partidos" porque, en realidad, se trata de "una farsa", ya que "no importa a quién voten" los habitantes de EE.UU., ya que "tendrán el mismo Gobierno".