El presidente estadounidense, Donald Trump, ha llevado a cabo este viernes públicamente una amenaza sin precedentes: no hacer nunca más ruedas de prensa y limitarse a publicar comunicados. En una serie de tuits, el mandatario estadounidense ha señalado que "los medios falsos están trabajando horas extras hoy" y que sus asesores no pueden ser precisos todo el tiempo ya que "es un presidente muy activo".
"¿No sería posiblemente lo mejor cancelar todas las futuras ruedas de prensa y publicar respuestas escritas en aras de la precisión?", se ha preguntado Trump. Más tarde el presidente ha publicado otro tuit en que ha asegurado que Comey debería esperarse a confirmar que no haya grabaciones de sus conversaciones "antes de empezar a filtrar a la prensa".
De esta forma el presidente ha reaccionado a las críticas de sus oponentes por los contradictorios comentarios que llegan desde la Casa Blanca sobre el despido del director del FBI James Comey. El jueves 11 de mayo Trump señaló que estaba estudiando despedir a Comey independientemente de las recomendaciones del Departamento de Justicia, lo que contradecía las afirmaciones del vicepresidente Mike Pence.
Trump cesó al director del FBI el 9 de mayo "por la pérdida de confianza". El punto de inflexión que ocasionó que el presidente despidiera a Comey fue probablemente su negativa a revelar de antemano a los asesores del presidente un testimonio que este debió presentar ante el Senado hace una semana, según oficiales de la Casa Blanca.
...Maybe the best thing to do would be to cancel all future "press briefings" and hand out written responses for the sake of accuracy???— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) May 12, 2017