"Ecuador cumplió con su deber, le dimos asilo soberano [al fundador del portal Wikileaks, Julian Assange] y, finalmente, la Justicia sueca ha archivado el caso y no ha presentado cargos contra Assange", ha declarado este sábado el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, en su informe semanal de labores, recogen medios locales.
Según el mandatario, su país le dio asilo a Assange "porque no había garantías del debido proceso, porque había sectores de Estados Unidos que amenazaban hasta con la pena de muerte a Julian Assange". En este sentido, ha subrayado Correa, "nunca quisimos obstruir la marcha" de la Justicia de Suecia, ya que el fiscal sueco "podía entrevistar a Julian Assange en la embajada" de Ecuador en Londres, donde el australiano se encontraba.
"Lo permite la legislación sueca", ha recalcado Correa. "Lo hicieron, pero después de cuatro años y se demoraron ocho meses más en archivar la causa y, mientras tanto, Julian Assange ha estado casi cinco años en la embajada del Ecuador", se ha lamentado.
Ese mismo día el canciller de Ecuador, Guillaume Long, aseguró a RT que su país está "complacido" con la decisión sobre Assange, si bien considera que ha llegado "muy tarde". Además, recordó que "falta que en Reino Unido le den salvoconducto para que pueda salir del país y disfrutar de su asilo".
El 19 de junio de 2012, tras ser acusado de abuso sexual en Suecia, Assange se refugió en la Embajada de Ecuador en Londres y presentó su solicitud formal de asilo político ante este país, pedido que fue aprobado el 16 de agosto de 2012 y se mantiene vigente hasta hoy. Desde entonces, y durante 1.795 días, Assange ha permanecido refugiado en las instalaciones de la sede diplomática del país suramericano. El caso contra Assange fue suspendido este viernes.