El linchamiento de un exmilitar venezolano por parte de un grupo de opositores que lo acusaron de "infiltrado", "es un crimen de odio sin precedente que evidencia que la oposición pudiera no tener el control de los actos que promueven", explica a RT el experto en Derechos Humanos, Wilman Verdú.
El pasado sábado 27 de mayo, en la ciudad de Cabudare (a 350 km al oeste de Caracas), Danny Subero, de 34 años, teniente retirado de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), fue agredido tras ser llamado "infiltrado" en el acto fúnebre en memoria de Manuel Sosa, quien había fallecido por disparos en una protesta opositora en la misma zona el día anterior.
En medio de la golpiza, una imagen de los últimos momentos de vida de Subero fue captada por las cámaras y publicada en las redes sociales.
Los últimos instantes del Tte de la GNB Danny Subero, antes de ser asesinado por una jauría de "pacíficos demócratas" pic.twitter.com/hNaZ1oACfA— Eduardo Rothe (@profesorlupa) 28 de mayo de 2017
Según medios locales, Subero se encontraba en el lugar de la concentración cuando fue rodeado por un grupo de jóvenes que le quitó sus pertenencias y al ver su carnet para conducir vehículos militares, lo golpeó salvajemente hasta acabar con su vida y dejándolo tirado en medio de la vía. Su cuerpo además presentó varias heridas de bala y su moto fue quemada.
Danny Subero...Lo lincharon solo por tener carnet de la GNB !Horrendo Crimen de la Derecha Fascista! pic.twitter.com/A0Vj6loW1g— raul h. (@revoldangatario) 28 de mayo de 2017
El presidente Maduro catalogó el hecho como "un crimen de odio que llena de heridas el corazón de la patria" e informó que "los responsables están identificados y los vamos a buscar hasta debajo de las piedras y van a ir presos", reseña 'Panorama'.
Muestra @NicolasMaduro foto de Danny Subero, muerto ayer x linchamiento fascista en Lara y reclama condena internacional al crimen de odio pic.twitter.com/qYittyYWLs— Ernesto Villegas P. (@VillegasPoljak) 28 de mayo de 2017
El defensor del pueblo, Tarek William Saab, expresó su condena y manifestó que los crímenes de odio "han desarrollado su caldo de cultivo violento en Venezuela entre abril y mayo".
Además, hizo un llamado a hacer frente a "este brutal fenómeno" que atenta contra la paz.
7) INSTO a toda la sociedad venezolana, especialmente a escuelas y medios d comunicación a hacer frente a este BRUTAL FENOMENO q amenaza la— Tarek William Saab (@TarekWiliamSaab) May 28, 2017
8)..la #PAZ d nuestra amada nación produciendo un daño irreversible a futuras generaciones quienes validaran por esta vía la DISCRIMINACION— Tarek William Saab (@TarekWiliamSaab) May 28, 2017
Por su parte, el Ministerio Público venezolano anunció la apertura de una investigación sobre lo ocurrido.
Rechazo a la violencia
"Este es un crimen de odio contra una persona que no conoces, con quien no tienes ningún tipo de relación ni vínculo. La motivación es fútil", explica Verdú.
La muerte de Subero se suma a la salvaje agresión que sufrieron dos jóvenes que fueron quemados por una turba por "parecer chavistas" durante las protestas opositoras contra el Gobierno de Nicolás Maduro, que ya alcanzaron los 60 días de duración en Venezuela.
"Ellos pudieran no tener control sobre los problemas de adrenalina de sus seguidores, ellos pudieran no tener control sobre quienes promueven los actos de violencia", dice Verdú, en referencia a los grupos de choque financiados por la dirigencia opositora, según investigaciones de la Inteligencia del Estado.
En su opinión, el desbordamiento de la violencia propiciada por factores extremos de la derecha "ha generado el rechazo de sus propios aliados", lo que considera que podría "detener la oleada de agresiones".
Verdú explica que los grupos que participan en los ataques contra funcionarios de seguridad venezolanos o chavistas son mixtos y que tras esta muerte habrá una escisión.
"La gente común va a deslindarse de esos hechos, mientras que los factores que los cuerpos de seguridad han identificado como paramilitarizados, no", pronostica.
"Infiltrado"
Tanto los medios de comunicación como los voceros de la oposición catalogaron a Subero como "infiltrado".
El diputado del partido ultraderechista Volutad Popular, Freddy Guevara, utilizó ese término en el tuit que compartió tras conocerse la noticia.
Condeno violencia asesina del régimen y condeno linchamiento de infiltrado en Lara. El dolor no puede convertirnos en lo que combatimos.— Freddy Guevara (@FreddyGuevaraC) 28 de mayo de 2017
Días atrás, el 22 de mayo, había publicado en su cuenta de 713 mil seguidores una alerta sobre la acción de presuntos infiltrados en los hechos violentos ocurridos durante las protestas de la oposición.
Falso que radicales son infiltrados, pero si es cierto que infiltrados se infiltran (valga la redundancia) en grupos radicales. Mosca— Freddy Guevara (@FreddyGuevaraC) 22 de mayo de 2017
La palabra "infiltrado", expresa Verdú, se fue acuñando hasta que fue asumida como una realidad.
En su criterio, cada persona le incorpora al término características específicas que hacen que los hechos donde participan tengan justificación: "No fuimos nosotros, fueron los infiltrados".
Eliminar lo diferente
El periodista y analista político Freddy Fernández definió a RT la muerte de Subero como un acto de "eliminación de lo diferente"
"Lo revisaron, le encontraron un carnet que permitía manejar vehículos militares y eso fue suficiente excusa para considerarlo digno de ser linchado", agrega.
En su opinión, existe "una carga de violencia enorme que ha impulsado toda la propaganda de la oposición" en contra de los cuerpos de seguridad del Estado y el chavismo.
Según Fernández, "la campaña de criminalización en contra de la GNB y la Policía Nacional Bolivariana ha sido permanente".
Aunque los cuerpos de seguridad han sido acusados por dirigentes de la oposición de "reprimir brutalmente" a los manifestantes, "todo el proceso de enfrentar la ola de violencia ha sido tratado con tres elementos: agua, gas lacrimógeno y presencia física, no se utilizan escopetas con perdigones", asegura.
"Hay una visión muy extraña: están convencidos de que 95% del país apoya lo que hacen y encontrar quienes discrepen de su visión los desconcierta, porque no entienden cómo alguien puede pensar de manera distinta, y para ellos, la mejor manera de tratar a la diferencia, es eliminándola", concluye el analista.
Nathali Gómez