La velocidad supersónica de 'Hyperloop': de Madrid a Tánger en 47 minutos
Puede que estemos a punto de conocer el transporte del futuro para cubrir largas distancias: el Hyperloop, esa idea revolucionaria de Elon Musk, en la que vehículos parecidos a los actuales trenes viajan a gran velocidad por el interior de tubos de cientos de kilómetros. Una de las empresas que pretende ser pionera en esta tecnología es Hyperloop One y ya ha planeado algunas rutas para Europa.
De momento, hay más teoría que práctica, aunque es cierto que hasta ahora se han efectuado pruebas con buenos resultados, haciendo viajar un pequeño vehículo a altas velocidades por un tubo cerrado al vacío. 'Hyperloop One' quiere crear los primeros corredores en Europa, es decir, estructuras tubulares que unen varias ciudades europeas en menos de una hora, aunque estén separadas por varios cientos de kilómetros.
Algunas de las propuestas concretas son realmente interesantes: tal como destaca el diario '20 Minutos' el corredor de Países Bajos uniría Amsterdam, Rotterdam, Eindhoven, Den Bosch, Arnhem, Lelystad en un círculo de 428 kilómetros, en tan sólo 41 minutos; el de Inglaterra recorrería los más de 600 kilómetros que separan Londres de Edimburgo en 50 minutos, pasando por Birmingham y Manchester.
Para España 'Hyperloop One' tiene una idea sorprendente y ambiciosa. Aunque podría hacerlo perfectamente, su propuesta no trata de unir grandes ciudades como Sevilla, Madrid o Barcelona, sino de unir España con Marruecos. En concreto, la empresa quiera crear una conexión tubular entre Madrid y Tanger, de manera que el vehículo pueda cubrir esa enorme distancia en tan sólo 47 minutos. Con ello, el recorrido Madrid-Algeciras (594 km) se completaría en 42 minutos.
En teoría, la velocidad alcanzada por este medio de transporte sería ligeramente superior a 1.200 km/h. La propulsión de los vehículos se produce a causa del efecto del vacío hacía uno de los lados. Al permanecer en ese vacío se eliminan las fricciones, aumentando la velocidad hasta límites desconocidos y casi inimaginables hasta ahora en el transporte terrestre. Además, los desarrolladores de esta tecnología afirman que es muy segura, y señalan que cuenta con la ventaja de que es prácticamente insensible a las inclemencias del clima.