El Pentágono ha prometido proteger con todos sus medios a EE.UU. y sus aliados contra cualquier amenaza de Corea del Norte, tras determinar que el último proyectil lanzado por Pionyang corresponde a un misil balístico intercontinental.
"Permanecemos preparados para defendernos a nosotros mismos y a nuestros aliados, y para utilizar toda la gama de capacidades a nuestra disposición contra la creciente amenaza de Corea del Norte", aseveró a través de un comunicado Dana White, portavoz del Pentágono, condenando el lanzamiento norcoreano de este 4 de julio como un "escalamiento".
White detalló además que EE.UU. "busca solamente la desnuclearización pacífica de la península coreana", pero que el compromiso norteamericano con la defensa de sus aliados de Corea y Japón "permanece inconmovible".
La reacción por parte de Washington viene después de que Corea del Norte se jactara de llevar a cabo un exitoso lanzamiento de su misil Hwasong-14, que supuestamente recorrió 933 kilómetros, alcanzó una altura de 2.802 kilómetros y estuvo 39 minutos en el aire, con lo cual se habría convertido en el misil norcoreano que habría efectuado el vuelo más prolongado.
Amenaza intercontinental
Las evaluaciones militares iniciales realizadas por EE.UU. y Rusia clasificaban el proyectil no como intercontinental, sino como de alcance intermedio. Sin embargo, después de revisar los datos, tanto el Pentágono como el Departamento de Estado de EE.UU. ahora creen que el caso es el contrario.
"EE.UU. condena enérgicamente el lanzamiento de un misil balístico intercontinental por parte de Corea del Norte", comunicó el secretario de Estado, Rex Tillerson. Washington "nunca aceptará a una Corea del Norte con armas nucleares", agregó.