En la declaración de un joven encapuchado a las autoridades judiciales venezolanas, se detalla que antes de iniciar los enfrentamientos con la Policía o la Guardia Nacional, los guarimberos cantan el himno nacional, seguidamente una canción religiosa y recitan fragmentos de oraciones que les dan aliento para el combate.
Ese relato es apenas un elemento más que demuestra la utilización de la religión católica (símbolos, imágenes y oraciones) para los objetivos políticos de los partidos opositores.
Los jóvenes encapuchados que chocan con las fuerzas del orden reciben los calificativos de héroes o libertadores por parte de dirigentes políticos que dicen que están sosteniendo una "cruzada" al estilo de las realizadas en la Edad Media.
¿Alguien ha visto un guarimbero inteligente? Es por una duda que tengo. pic.twitter.com/tkwF1ZO0m8— Roberto Hernández M. (@rhm1947) 12 de julio de 2017
Santa guarimba
En el testimonio de un encapuchado publicado por anteriormente por RT, se detalla que los guarimberos son dotados por dirigentes opositores de bombas molotov, máscaras antigases, pañuelos y biblias como parte de sus implementos de combate.
Casi un mes atrás, el ministro de la Defensa de Venezuela, el general Vladimir Padrino López, expuso en su cuenta Twitter la imagen de un obispo católico bendiciendo a un grupo de guarimberos que se disponía a enfrentarse con la Policía.
Lo que ahora se hizo una antinomia: Curas llamando a la violencia y Militares llamando a La Paz. Que contrariedad! pic.twitter.com/kgdISxMG6L— Vladimir Padrino L. (@vladimirpadrino) 16 de junio de 2017
También fue difundido en las redes un video similar. En las imágenes puede verse a una columna de encapuchados que levantan sus escudos mientras desfilan por la nave central de una catedral católica ubicada en la ciudad de Barquisimeto (estado Lara), luego de recibir la bendición de un religioso.
Templarios Unidos en Resistencia acogemos el llamado iglesia del Vaticano REVELARSE CONTRA DICTADURA DE VENEZUELA https://t.co/1CZmeYmEvZ… pic.twitter.com/IqTjPOvosg— TemplarioResistencia (@TemplarioResisT) 3 de enero de 2017
Perversión
Para el sacerdote jesuita y teólogo Numa Molina, la utilización de la simbología religiosa en el marco de esos hechos violentos (guarimbas) solo puede definirse como "fundamentalismo religioso cristiano".
En entrevista con RT, el también periodista precisó que en las protestas encabezadas por los partidos políticos antichavistas "se observa un nivel de violencia que intenta copiar las prácticas de los fundamentalismos islámicos o sionistas".
Recordó que a lo largo de la historia, al igual que ocurrió con otras religiones, se empleó al cristianismo en guerras e invasiones, a pesar de que su "origen es bondadoso y con un doctrina sana".
"La vinculación perversa" del cristianismo católico en el genocidio de Ruanda es uno de los ejemplos "más tristes de la historia donde la jerarquía de la Iglesia jugó un triste papel".
Símbolos aceptados
Para el teólogo, el uso de símbolos reconocibles como cruces, santos, rosarios y oraciones de manejo común obedece a una razón estratégica para los ejecutores de esos actos agresivos.
"En el caso venezolano no podrían utilizar los símbolos judíos, porque un símbolo que no esté inculturado no es capaz de transmitir nada. Por ejemplo, a un venezolano no le dice nada una media luna, pero sí una cruz".
Para Molina, el empleo de códigos remite "al oscurantismo medieval de las cruzadas, cuando matar musulmanes era visto como algo bueno, era una alabanza a Dios".
A los jóvenes encapuchados, agrega el sacerdote jesuita, se les inculca que "matar a un policía, a un guardia nacional o a un chavista es algo bueno, y se lo transmiten utilizando simbología cristiana. Pero la mayoría de esos niños no tienen ni idea de los que esos símbolos significan".
Este panorama ocurre, subraya, porque la "institución eclesial venezolana, no la Iglesia (pueblo), es una cúpula, una élite religiosa históricamente muy bien tratada por la oligarquía económica. Por eso, a la institución eclesial le resulta mucho más cómodo estar del lado de los ricos y no del pueblo que busca su emancipación".
Como muestra de la relación de la cúpula eclesial con el antichavismo, varias iglesias católicas serán utilizadas como centros de votación en el ilegal plebiscito contra Nicolás Maduro.
Ernesto J. Navarro