¿A cualquier precio? Más de 40.000 civiles muertos en batalla por recuperar a Mosul del EI
Más de 40.000 civiles han muerto en el marco de la devastadora batalla por retomar Mosul del control del Estado Islámico, ha declarado Hoshyar Zebari, un alto funcionario kurdo que hasta finales del año pasado fue ministro de Hacienda iraquí. Así lo evidencian los últimos informes de los servicios de inteligencia kurdos, informa 'The Independent'.
Según él, los residentes de la ciudad fueron asesinados a causa del "fuego masivo usado contra ellos" por las fuerzas terrestres iraquíes que intentaban forzar la marcha de militantes, así como por los ataques aéreos y por la acción del propio Estado Islámico. En relación a esto último, Zebari comenta que la inteligencia había interceptado mensajes "de combatientes del EI diciendo a sus comandantes que estaban cansados de matar civiles".
El exministro de Hacienda iraquí especifica que actualmente muchos cuerpos "aún están enterrados bajo los escombros". "El nivel de sufrimiento humano es inmenso", lamenta, añadiendo que existen "más de un millón de personas desplazadas".
Corrupción y sobornos
El ex alto funcionario kurdo afirma que los informes de inteligencia denuncian que existe un alto nivel de corrupción dentro de las fuerzas militares iraquíes que ocupan Mosul, el cual está socavando las medidas de seguridad para suprimir al EI después de su derrota. Según Zebari, las personas que son sospechosas pueden salir en libertad si pagan cierta cantidad de dinero y pueden pasar a través de los puntos de control militares pagando 1.000 dólares (si llevan consigo un vehículo deben pagar 1.500 dólares).
La proliferación de este tipo de sobornos ha llevado a un cambio de actitud entre los ciudadanos de Mosul, los cuales "estaban dispuestos a dar información sobre los miembros del EI a las fuerzas de seguridad iraquíes". Sin embargo, ahora tienen miedo de hacerlo por si los militantes yihadistas quieren vengarse tras ser puestos en libertad.
Zebari acusa al Gobierno de Bagdad "de ser indiferente a lo que ha sucedido" y afirma estar decepcionado por su falta de planes para reconstruir Mosul. Como ministro de Hacienda iraquí había previsto un presupuesto de 500 millones de dólares, "pero ahora el Gobierno se ha retirado del fondo y ha utilizado el dinero en otros lugares"
Asimismo, duda que los cristianos, los yazidíes y los kurdos, entre otras minorías que han vivido dentro y en los alrededores de Mosul durante siglos, puedan reconciliarse con la mayoría árabe sunita (a los cuales acusan de matar y violar a su pueblo). El ex alto funcionario kurdo afirma que una solución federal para la gobernanza futura sería lo más adecuado.