Pocos días quedan para que podamos observar las perseidas, lluvia de meteoros de actividad alta que también es conocida como lágrimas de San Lorenzo. Este año podrán verse cerca de 80 meteoros por hora atravesando la atmósfera terrestre, aunque en años especialmente activos como 2016, la cifra puede alcanzar los 150-200 meteoros por hora, informa el portal space.com.
¿Cuándo será visible?
En el 2017, el pico de actividad estará cerca de las 5 p.m. (GMT) del 12 de agosto. Por ello el mejor momento para observar los pequeños cuerpos celestes será la noche del 12 al 13 de agosto, en especial dutrante las horas previas al crepúsculo. Sin embargo, este año las perseidas serán levemente más difíciles de distinguir a simple vista a causa de la presencia de la Luna, que estará por la mitad del cuarto menguante.
"El nivel de visibilidad de los meteoros será aproximadamente la mitad de lo normal, debido al intenso brillo de la Luna. En vez de los habituales 80 a 100, se podrán observar entre 40 y 50 por hora, ya que los más tenues se perderán en la luz de la Luna. Pero la buena noticia es que las perseidas contienen muchas partículas luminosas [estrellas fugaces]", explicó el experto en meteoros de la NASA Bill Cooke.
¿Dónde se podrá observar?
El fenómeno de la lluvia de meteoritos se podrá observar principalmente en el hemisferio norte. En palabras de Cooke, la mejor manera de disfrutar de este espectáculo es desde un lugar abierto, con la mayor parte de cielo visible que sea posible. Al estar en oscuridad, el ojo tarda unos 30 minutos en adaptarse a estas condiciones. Mientras más tiempo se pase a oscuras en los momentos previos, mayor será la percepción de los cuerpos celestes que atraviesan el cielo nocturno.
Las causas del fenómeno
El cometa Swift-Tuttle es el objeto más grande en pasar repetidamente cerca de la Tierra del que se tiene conocimiento. El diámetro de su núcleo es de unos 26 kilómetros. La última vez que pasó cerca de la órbita terrestre fue en 1992 y la próxima será en 2126. Cada año, nuestro planeta atraviesa el rastro de ese cometa, formado por polvo y fragmentos, los cuales causan la lluvia de meteoros.
Cuando observamos este fenómeno, lo que presenciamos son las partículas del cometa que, al entrar en nuestra atmósfera a 59 kilómetros por hora, se calientan y se queman, dejando un rastro luminoso en el cielo. Cuando se encuentran en el espacio, estos fragmentos de cometa se denominan 'meteoroides', pero al alcanzar la atmósfera terrestre se designan como 'meteoros'. En el caso de llegar a alcanzar la superficie del planeta, pasan a llamarse 'meteoritos'. La mayor parte de los meteoros que forman las perseidas son demasiado pequeños para alcanzar la Tierra, ya que su tamaño es equivalente a un grano de arena.