Ningún presidente estadounidense ha vivido tantas tensiones relacionadas con Corea del Norte como Donald Trump, afirmó el excongresista estadounidense David Jolly.
"Anteriormente Corea del Norte no disponía de armas nucleares capaces de alcanzar el territorio de Estados Unidos, pero ahora Donald Trump tiene que lidiar con esa situación", comentó en directo el exrepresentante republicano por el estado de Florida en el programa 'Politicking' de RT America.
Según Jolly, si la situación desemboca en un conflicto militar, la única opción aceptable para EE.UU. sería seguir la doctrina 'Shock and Awe' (sorpresa y pavor), usada en la invasión de Irak en el 2003 y que consiste en el uso abrumador del poderío militar y demostraciones espectaculares de fuerza para paralizar la percepción del adversario del campo de batalla y destruir su voluntad de luchar.
La única opción
El político cree que Corea del Norte dejaría de existir en el curso de un mes si su líder, Kim Jong-un, atacara a la isla de Guam, un territorio no incorporado de EE.UU. ubicado en el oeste del océano Pacífico.
"En caso de que estalle un conflicto militar, sería la única variante. Un ataque de alta precisión no es la opción, dado el alto riesgo que supone que el loco Kim Jong-un tenga tiempo para lanzar todo lo que tiene contra el mundo, atacando a Japón, Corea del Sur y, probablemente, el territorio de EE.UU.", señaló.
La escalada de tensión entre Washington y Pionyang se intensificó la semana pasada, cuando el presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró que si Corea del Norte agravaba la amenaza nuclear, la respuesta de EE.UU. sería "un fuego y una furia que el mundo nunca ha visto". Ante este ultimátum, Pionyang respondió que elaboraría un plan para atacar con misiles la isla de Guam.