Según cifras del estudio 'Panorama de violencia contra las mujeres en Michoacán', elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los estados de México (con 61,4 %), Nayarit (58,8 %), Michoacán (45,4 %) y Guerrero (34,1 %) registraron los mayores índices de agresiones contra personas del sexo femenino y de origen indígena.
En el caso específico de Michoacán, el Inegi apunta que "las mujeres hablantes de lengua indígena", que representan 3,9 % de la población total de ese estado, enfrentan niveles de violencia mayores que las del resto del país, "al alcanzar a 45,4 % las que han soportado violencia por parte de su pareja".
La situación de las mujeres consideradas como "no indígenas" o "no hablantes de lengua indígena" se encuentra casi a la par en ese estado, con un índice de 44,8 % de agresiones de pareja, es decir, apenas 0,6 % menos que las indígenas michoacanas.
El Inegi clasifica esas agresiones en dos grandes grupos: violencia emocional y económica, en la que las indígenas michoacanas (97,2 %) y las mujeres no indígenas (97,8 %) sufren casi los mismos abusos; y violencia física y sexual, en la que las primeras representan el 40,1 % de los casos y las segundas un 33,8 %.
Según el instituto estadístico, el 95,5 % de las mujeres indígenas de toda la República Mexicana han sido víctimas de violencia emocional y económica, porcentaje que en el caso de las mujeres no indígenas se sitúa en 98,1 %.
En el tema específico de las agresiones físicas y sexuales, las indígenas de todo el país reportan mayor incidencia, al totalizar el 40,6 % de los casos, mientras que 29,5 % corresponde a las no indígenas. Un flagelo que se ha hecho común en México.