El primer cometa conocido que provendría del exterior del Sistema Solar fue descubierto en Hawái el 18 de octubre pasado y, ahora, especialistas de la NASA detallaron sus características, que no siguen las típicas cualidades de los asteroides.
Según la descripción de la agencia espacial, el C/2017 U1 tiene un aspecto alargado, como un enorme cigarro de unos 400 metros de longitud, y su color es rojo oscuro. Su forma podría brindar nuevas claves sobre cómo otros sistemas estelares se formaron, publicó Nature.
Respecto de su procedencia, las primeras estimaciones indican que avanza a unos 64.000 kilómetros por hora desde una dirección en la que se encuentra la constelación de Lyra, por lo que tardará algunos años en cruzar todo el Sistema Solar antes de abandonarlo para no regresar.
Dudas sobre su origen
Bautizado como 'Oumuamua', voz hawaiana que refiere a un mensajero que llega de lejos, este asteroide no gira alrededor del sol, sino que sigue una trayectoria angular respecto de las órbitas de otros planetas. "Si nuevas observaciones confirman la naturaleza inusual de su órbita, este objeto sería el primer caso de cometa interestelar", anunció el Centro de Planetas Menores de la Unión Astronómica Internacional.
Sin embargo, no todos los especialistas están convencidos de su procedencia exterior. La especialista planetaria Maria Womack, de la Universidad del Sur de Florida, señaló que la particularidad de su recorrido podría derivar de una "interacción con Júpiter u otro planeta" que podría haberle hecho cambiar su órbita.
Cambia su tonalidad
De acuerdo con los especialistas, el cometa varía de manera drástica su brillo cada vez que gira sobre su propio eje, lo que sucede cada poco más de siete horas, explicó Karen Meech, del Instituto de Astronomía de Hawái: "Este inusual cambio en el brillo significa que el objeto es alargado: unas diez veces más largo que ancho, con una forma compleja".
"También descubrimos que tiene un color rojizo, similar al de los objetos del Sistema Solar exterior, y confirmamos que es completamente inerte, sin el más mínimo rastro de polvo a su alrededor", agregó. Según Meech, su enrojecimiento fue consecuencia de la irradiación de los rayos cósmicos a lo largo de cientos de millones de años.
Estas propiedades sugieren que el cometa es denso, está compuesto por rocas y, tal vez, metales y no contiene ni agua ni hielo.