Rusia ha puesto en servicio cerca de la frontera sur del país nuevas estaciones del sistema de alerta temprana de nueva generación Vorónezh-DM, según afirmó el general-coronel Alexander Golovkó, comandante de las Fuerzas de Defensa Aeroespacial del Ejército ruso, en entrevista con el diario Krásnaya Zvezdá.
"Tres estaciones de radiolocalización de clase Vorónezh del sistema de alerta sobre ataques de misiles han entrado inmediatamente en servicio operacional para el control por radar en las zonas designadas", indicó Golovkó, precisando que dichas zonas corresponden a las regiones de Krasnoyarsk, Altái y Oremburgo.
La familia de radares Vorónezh se compone de estaciones de varios tipos: de ondas métricas, decimétricas o centimétricas, cada una de los cuales difiere en sus características y tareas. Estos radares de barrido electrónico activo son capaces de detectar blancos aéreos y misiles hipersónicos —con velocidades superiores a Mach 5— en un rango aproximado de 6.000 kilómetros.
Los sistemas Vorónezh se encontraban en régimen de prueba en el sur de Rusia desde finales del año pasado, y se prevé que su despliegue por el resto del país concluya en 2019. Estos forman parte de la red de radares avanzados con las que Moscú pretende rastrear y controlar cualquier peligro potencial en el espacio aéreo desde su propio territorio.